En 2016, con el cambio de gobierno municipal, la promesa de la alcaldía fue conectar 40.200 hogares a los servicios de agua potable en Medellín.
Hoy, a menos de tres meses de terminar el periodo, la administración y EPM reportaron que 36.248 familias ya cuentan con estos servicios públicos, alcanzando un cumplimiento del 90 %.
Adicionalmente, los beneficiados cuentan con alcantarillado, logrando la recuperación de quebradas donde antes eran arrojadas aguas negras y mejorando las condiciones ambientales y de salubridad de las cuencas.
Legalizar los servicios públicos domiciliarios también posibilita acceder a otro tipo de beneficios como el Mínimo Vital de Agua Potable, con el cual la alcaldía los acompaña para promover hábitos de ahorro en el consumo del líquido, al tiempo que les auspicia 2.500 litros al mes por cada integrante del hogar que haga parte de la ficha del Sisbén.
El programa genera empleos en las zonas intervenidas durante las obras de instalación de redes.
El objetivo es alcanzar la conexión de las 40.200 familias beneficiadas en diciembre, con una inversión estimada en $250.000 millones.
El reto de la próxima alcaldía será lograr cobertura plena del acueducto porque aún cumpliendo la meta, restan 30.000 familias por conectar.