El empresario Elon Musk anunció este miércoles su salida como “empleado especial” del Gobierno de Estados Unidos, un cargo al que fue nombrado por el presidente Donald Trump para supervisar recortes presupuestarios en agencias federales.
“A medida que mi tiempo programado como Empleado Especial del Gobierno llega a su fin, me gustaría agradecer al Presidente Donald Trump por la oportunidad de reducir el gasto innecesario (sic)”, escribió Musk en su cuenta de X.
“La misión solo se fortalecerá con el tiempo a medida que se convierta en una forma de vida en todo el gobierno”, añadió el magnate, quien dirige Tesla, SpaceX y la red social X.
El anuncio llega luego de que el magnate criticara el megaproyecto de ley presupuestaria del presidente Trump.
Entérese: La dura crítica de Musk a la ley de Trump: “No se puede ser grande y hermoso si aumenta el déficit”
“Me decepcionó ver el proyecto de ley de gasto inmenso, francamente, que aumenta el déficit presupuestario (...) y socava el trabajo que está haciendo el equipo del DOGE”, una comisión creada para recortar el gasto federal, dijo Musk en una entrevista con la cadena CBS News de la que se emitió un fragmento el martes por la noche.
“Creo que un proyecto de ley puede ser grande o puede ser hermoso”, declaró Musk a CBS News, “pero no sé si puede ser ambas cosas. Es mi opinión personal”. La entrevista completa se emitirá el domingo.
Los comentarios de Musk constituyen una ruptura con el republicano, a quien ayudó a volver a la Casa Blanca tras un primer mandato de 2017 a 2021, a golpe de millones de dólares para financiar la campaña electoral de 2024.
En principio, el trabajo de la comisión estaba previsto hasta el 4 de julio de 2026, pero Musk afirmó que podría prolongarse durante los cuatro años de mandato de Trump.
“Depende del presidente”, dijo, aclarando no obstante que no desaparecería del todo y que quería mantener su pequeño despacho en la Casa Blanca para sus visitas semanales a Washington.
A finales de abril, Musk había anunciado que “probablemente en el próximo mes, mi asignación de tiempo a la DOGE disminuirá significativamente”.
“A partir del mes que viene, dedicaré más de mi tiempo a Tesla”, había dicho. En los resultados de su compañía de autos eléctricos Tesla, en el primer trimestre del año, las ganancias cayeron 71% respecto al mismo período de 2024.
Legalmente, un “funcionario especial” no puede ser empleado por más de 130 días, por lo que se esperaba que Musk pronto abandonaría su puesto. El magnate estuvo 129 días al frente de la comisión desde el inicio del mandato de Trump el 20 de enero.
“En algún momento, regresará” a sus negocios, dijo Donald Trump a principios de abril. Sin embargo, a inicios de mayo, el presidente había dicho que el empresario podía seguir formando parte de su equipo “el tiempo que quisiera”.
¿Qué hizo Musk en el gobierno Trump?
Una de sus primeras medidas fue enviar un correo electrónico a 2,3 millones de funcionarios ofreciéndoles una salida amistosa.
Aquellos que eligieron quedarse ahora debían enviar un correo electrónico semanal detallando cinco cosas que han hecho en la semana.
De un plumazo borró del mapa administraciones enteras, incluida USAID, la agencia responsable de la ayuda al desarrollo.
De la noche a la mañana los programas humanitarios se suspendieron, los empleados tuvieron que quedarse en casa y sus colegas expatriados se quedaron sin recursos al otro lado del mundo.
Blandió como una estrella de rock la motosierra que le regaló el presidente argentino Javier Milei, experto a su vez en meter tijera a los servicios públicos.
En DOGE, sus jóvenes informáticos tomaron los organismos públicos.
No hay más que mirar lo sucedido a la CFPB, el organismo federal para la protección de los clientes de los bancos, percibido por los trumpistas como un obstáculo para la libertad económica.
El DOGE se apoderó del sistema informático, excluyó a los funcionarios de la CFPB, bloqueó las transacciones financieras y se apoderó de los mensajes de la organización en las redes sociales.
“Descansa en paz, CFPB”, presumió Elon Musk en la red social X.
Tomó otras instituciones como blanco: todas las que tienen que ver con programas de diversidad, equidad e inclusión, bestias negras de la nueva administración.