Abrumados por el agravamiento de la crisis económica, los venezolanos votan este domingo en unas elecciones regionales claves para el gobierno y la oposición, que medirán cómo quedaron sus fuerzas tras enfrentarse violentamente durante cuatro meses en las calles.
Unos 18 millones de electores están llamados a las urnas en 13.559 centros de votación, que empezaron a abrir a partir de las 6:00 a.m (5:00 a.m. en Colombia) , para designar por cuatro años a los gobernadores de los 23 estados del país petrolero.
Votantes, algunos con banderas venezolanas, formaban filas en colegios electorales, varios de los cuales abrieron más tarde de lo previsto, reconoció el poder electoral.
“Este país o cambia o termina de hundirse. El cambio no es un camino fácil, la batalla hay que darla, hay que pelear”, aseguró Mary Delgado, administradora de 63 años, tras votar en un colegio en el este de Caracas.
En Maracaibo, ciudad petrolera en el este de Venezuela, Carmen de Guillén, militante chavista de 52 años, salió a votar porque considera que el gobierno favorece la “inclusión”, y “se preocupa por los más pobres”.
Los comicios se celebran con un año de retraso y luego de dos meses de tregua tras las marchas que dejaron unos 125 muertos entre abril y julio, convocadas por la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) para exigir la salida del presidente Nicolás Maduro.
El mandatario, que se declara ganador del pulso en las calles, convirtió estos comicios en una legitimación de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente, desconocida por la oposición y varios países de América y Europa.
“Esto es un triunfo de la democracia revolucionaria. La Constituyente ha convocado esta elección con su poder plenipotenciario y tenemos que ir a votar por la paz”, expresó Maduro, en un mensaje en la apertura de las urnas desde el Palacio de Miraflores.
La MUD busca relanzar su lucha y demostrar que aún es mayoría. Es el primer duelo electoral desde su aplastante victoria en las parlamentarias de 2015, cuando rompió una hegemonía chavista de 18 años.
Un nuevo conflicto
Alistándose ante otro eventual avance de la MUD, Maduro dijo que los gobernadores electos deberán subordinarse ante la Constituyente, totalmente oficialista pues la oposición no participó en su elección al considerarla fraudulenta.
La coalición opositora descartó de plano seguir esa orden. A las puertas está un nuevo repunte del conflicto.
“No estamos en una fiesta democrática, estamos en una lucha por la democracia. Este proceso no está convocado ni por la Constituyente, ni por Maduro, está convocado por el pueblo venezolano y por mandato de la Constitución”, dijo Gerardo Blyde, jefe de campaña del bloque opositor tras sufragar.
Aunque la MUD domina el Parlamento, su poder fue anulado por la Corte -acusada de oficialista-, y algo así puede ocurrir a los gobernadores con la Constituyente.
No obstante, la MUD llamó a su gente a desoír esos mensajes de Maduro que -cree- promueven la abstención. “Vamos a deslegitimar a la Constituyente” con el voto masivo, pidió el diputado opositor Miguel Pizarro.
El oficialismo, con una poderosa maquinaria propagandística, intenta defender las 20 gobernaciones en su poder, pero las encuestadoras Delphos y Datanális dan a la oposición de 11 a 18 estados, según la abstención.
La MUD acusó al Consejo Nacional Electoral (CNE), señalado de oficialista, de buscar afectar sus votos al no permitirle sustituir candidatos que inicialmente había inscrito, y al reubicar a última hora 274 centros de votación en 16 estados.
Así va la votación
La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, Tibisay Lucena, informó este domingo de que a casi dos horas del inicio de las elecciones de gobernadores prácticamente el 95 % de los centros estaban abiertos y atendiendo votantes.
La jefa del Poder Electoral dijo al canal estatal VTV que antes de las 8:00 de la mañana (7:00 de la mañana en Colombia) “prácticamente en país entero los centros y las mesas electorales estaban abiertas” y había informes de “electores en cola”.
Explicó que en los estados Amazonas (sur) y Delta Amacuro (noreste), los menos poblados, se habían presentado “problemas de conectividad” en las primeras horas pero que, pese a ello, el promedio de apertura era cercano al 80 %.
“Esta vez no tenemos ni un solo reporte, no hay nada que reportar que sea algo de interés para comentar. Todo se está desenvolviendo en todo el país de una forma muy tranquila y muchísimo mejor de lo esperado para la hora”, sostuvo tras indicar que en promedio al ciudadano le está tomando un minuto y medio completar su votación.
Lucena indicó también que desde la apertura del proceso, que durará 12 horas, más de 60 invitados internacionales están desplegados en todo el país y remarcó la presencia de “parlamentarios europeos y periodistas” que operarán como acompañantes de esta contienda.
De los 18.094.065 venezolanos habilitados para sufragar, cerca de 600.000 se verán afectados por los cambios en la ubicación de centros en 17 de los 23 estados del país informados esta semana por el CNE, principalmente en la región andina de Mérida (oeste) y en el estado Miranda (norte).