El 91 % de las tierras de los pueblos indígenas en el mundo se encuentra en buenas o moderadas condiciones ecológicas, tal como lo revela un estudio elaborado por 30 expertos en conservación, junto con líderes indígenas y organizaciones de derechos humanos.
Según lo dio a conocer el Fondo Mundial para la Naturaleza, (WWF por sus siglas en inglés), “El estado de las tierras y territorios de los Pueblos Indígenas y las Comunidades Locales” es el título de esta producción científica, en la que además se observaron las presiones que enfrentan estos territorios y los habitantes que dependen de ellos.
El informe concluye que cualquier esfuerzo de conservación global, incluidos los llamados para proteger y conservar al menos el 30 % de la tierra, el agua dulce y los océanos del mundo para 2030, depende de una fuerte participación y liderazgo de los pueblo nativos y será inalcanzable el objetivo sin ellos.
“La mayoría de los territorios de los pueblos indígenas tienen grandes amenazas, que en esta pandemia se han agudizado. Una de ellas es la falta de reconocimiento de la titularidad de las tierras. Esa es una amenaza histórica, no reciente”, apuntó José Díaz Mirabal, coordinador general de la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (Coica).
Precisamente, en la investigación se resalta que la Amazonía es hogar de más de 3 millones de indígenas, pertenecientes a 500 pueblos y diferentes nacionalidades, cuyos conocimientos tradicionales ayudan al aprovechamiento sostenible de los recursos.
Sin embargo, tal como lo señaló Díaz Mirabal, “la mayoría de los territorios indígenas en la cuenca amazónica todavía no están titulados, sobre todo los que están mejor conservados. Gran parte de ellos ya están concesionados a petroleras, mineras, sin respetar que ahí estamos los pueblos indígenas. Es por eso que la falta de titulación es una debilidad”.
“Mientras intentamos reparar nuestra relación quebrantada con la naturaleza, debemos aprender de los custodios históricos y apoyar plenamente sus esfuerzos para proteger, defender y restaurar sus tierras y aguas”, subrayó Delfin Jr. Ganapin, líder de la práctica de Gobernanza Global para WWF.
En Colombia
El territorio colombiano, según WWF, además de ser una de las naciones más biodiversas del mundo, cuenta con una gran diversidad cultural, representada en 87 pueblos indígenas que hablan 65 lenguas diferentes. Allí la Amazonia es fundamental, pues en ella habitan nada menos que 62 pueblos indígenas (el 71% del total), que hablan cerca de 42 lenguas diferentes (64 % del total).
Estos pueblos, de acuerdo con la organización, son propietarios del 54 % de los 48,3 millones de hectáreas que comprende esta región del país, distribuidas en cerca de 212 resguardos indígenas. Allí se encuentra el 62 % de los bosques aún existentes en la región.
“Aunque la importancia de los territorios indígenas de la Amazonia ha sido parcialmente reconocida por el gobierno nacional a través de acuerdos referentes a aspectos como la reducción de la deforestación, la restauración de ecosistemas transformados y en transformación, y la protección de sistemas de conocimiento tradicional asociados a la biodiversidad, aún queda mucho camino por recorrer en el reconocimiento efectivo de su papel”, enfatizó WWF.