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Si Colombia fuera una persona, su monedero en 2017 habría estado compuesto en su mayoría por billetes de 50.000 y 2.000 pesos, que representaron el 60,27 % del dinero circulante, según el Banco de la República.
Eso quiere decir que de cada 10 billetes que circularon en 2017, cuatro fueron de 50.000 pesos y dos de 2.000 pesos.
El profesor de Economía de la Universidad de Antioquia, Ramón Javier Mesa, explicó que este liderazgo se puede dar debido a “una baja tasa de bancarización en el país” y no, como sucede en otras economías, a la necesidad de emitir moneda de alta denominación para adquirir bienes y servicios elevados.
De hecho, el billete de mayor denominación del país, el de 100 mil pesos, sigue brillando por su ausencia en las carteras de los colombianos y apenas llegó a ocupar el 0,2 % de la masa monetaria circulante de 2017.
Las piezas de 10.000, 5.000 y 1.000 pesos significaron en cambio el 24,3 % del efectivo que circuló el año anterior.
Si hablamos de las monedas, las de 100, 200 y 500 fueron las que más rotaron por la economía con un 74,3 % de todo el dinero en metálico que circuló en 2017. Mientras que las de 50 y 1.000 pesos solo abarcaron el 25,07 %.
En total, 779,2 millones de pesos en efectivo circularon en la economía colombiana durante 2017, contando todos los billetes y todas las monedas emitidas por el Emisor en el año anterior.
Si hablamos solo de billetes, el efectivo circulante el año pasado estuvo compuesto por 29.897,9 millones de piezas, cuyo valor ascendió a 755,8 millones de pesos.
En el caso del dinero metálico, circularon 84.853,4 millones monedas, un valor total de 23,3 millones de pesos.
El docente de la Universidad de Antioquia explicó que estas estadísticas sirven para calcular la oferta monetaria de un país año tras año.
“El dinero que circula en una economía debe ser equivalente a lo que se espera que esta crezca más la inflación esperada”.
Así, lo explicó: “Por ejemplo, si en Colombia la inflación esperada para cierre de 2018 es 4 % y el crecimiento 3 %, el Banco de la República necesita alrededor de 8 % más de oferta monetaria de la que había en 2017”.