Con una investigación interna encomendada a la firma de abogados Ropes & Gray, Avianca Holdings busca establecer si fue perjudicada por actuaciones indebidas en las negociaciones hechas con el fabricante aeronáutico Airbus antes de marzo de 2016.
La aerolínea informó que contrató los servicios de ese bufete de abogados, para averiguar de manera independiente sobre el vínculo comercial entre Avianca y Airbus y determinar si la compañía fue víctima de corrupción.
El anuncio se dio a conocer luego de que Airbus acordara el pago de 3.598 millones de euros más intereses y costes a las autoridades francesas, británicas y estadounidenses, para las investigaciones por la comisión de presuntos sobornos.
“El acuerdo entre Airbus y las autoridades contiene acusaciones muy delicadas y preocupantes sobre el actuar de un individuo de Avianca en el periodo previo a marzo de 2016”, señaló en el texto Anko van der Werff, presidente de Avianca Holdings.
Igualmente, enfatizó en que “todos los miembros de la administración actual de la compañía rechazamos enfáticamente cualquier actuación o comportamiento que no refleje integridad y transparencia en el mundo corporativo”, se lee en la nota publicada en la web de la Superintendencia Financiera.
En un comunicado, Airbus anotó que por razones jurídicas no puede comentar sobre las constataciones de hechos publicadas por las autoridades de investigación, pero la agencia de noticias AFP indicó que las autoridades examinaron prácticas de corrupción cometidas entre 2004 y 2016 con ocasión de contratos de venta de aviones civiles en Colombia, China, Corea del Sur, Rusia, Nepal, Taiwán y Emiratos Árabes Unidos.
En abril de 2015, Avianca y el Grupo Taca suscribieron con Airbus un acuerdo de compra por 100 aeronaves A320neo para entrega desde el año 2018 hasta 2024.
