Con el fin de asegurar liquidez tanto en pesos como en dólares, el Banco de la República presentó un paquete de medidas, las cuales buscan “facilitar los flujos de recursos suficientes de crédito y el buen funcionamiento del sistema de pagos”.
Para fortalecer la liquidez en pesos, se incluyeron a las administradoras de pensiones y cesantías como entidades que están en capacidad de acceder a subastas y ventanillas de liquidez con deuda pública del emisor. Así mismo, se permitió a las aseguradoras a participar en subastas de repos con títulos de deuda pública y privada.
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Se extendió el acceso a los fondos administrados por medio de fiduciarias, comisionistas de bolsa y administradoras de inversión a las subastas de repos y a la ventanilla con títulos de deuda pública.
Así mismo, el plazo máximo de operaciones de liquidez con títulos de deuda pública pasó de 30 a 90 días. Además, “se extiende el plazo de las operaciones de liquidez (REPOS) con títulos de deuda pública a 60 días. Recientemente dicho plazo había sido de un día”.
El cupo de operaciones de liquidez a partir de títulos de deuda pública y privada se aumentó de 20 billones a 23,5 billones de pesos. “A la fecha hay $12,3 billones colocados a través de estas modalidades”, confirmó BanRep.
Frente a la liquidez en moneda norteamericana, se harán subastas por 400 millones de dólares, en las que BanRep venderá dólares de contado y los comprará en 60 días.
“Con esta medida se brinda liquidez transitoria en dólares a un grupo amplio de entidades que incluye no solo a los intermediarios tradicionales del mercado cambiario, sino también a las sociedades administradoras de pensiones y cesantías en posición propia y de sus fondos administrados, con el propósito de aliviar las presiones en el mercado cambiario”, confirmó el Banco.
Hernando Vargas, gerente técnico del Banco de la República, señaló que “las medidas no van encaminadas a alterar las ganancias o las pérdidas de ningún intermediario en particular sino a garantizar la liquidez en el corto plazo”.
El vocero también confirmó que por lo pronto no se afectarán las tasas de interés.
“Estas son medidas preventivas que buscan evitar comportamientos turbulentos en muchos segmentos del mercado monetario en Colombia”, concluyó Vargas.
