Menos trámites, formas más expeditas para resolver conflictos entre empresas, más garantías para sus administradores y un mayor arsenal sancionatorio para la Superintendencia de Sociedades, son algunos de los ajustes que propone la entidad en los 54 artículos del proyecto de ley 70 que ya comenzó su tránsito en la Comisión Tercera de la Cámara de Representantes.
Las modificaciones que se pretenden en el régimen societario colombiano no son de poca monta, pues ese marco regulatorio no se modifica desde 1995 e incidirán en la formación de nuevas empresas y en el funcionamiento de las 1,5 millones que se estima operan en Colombia de manera formal.
Entre tanto, el presidente de la Federación de Comerciantes de Colombia (Fenalco), Guillermo Botero Nieto celebra que el proyecto de ley introduzca facilidades que hoy tienen la sociedad por acciones simplificadas (SAS) a otro tipo de sociedades. Sin embargo, considera que “vale la pena dar la discusión”.
¿Para cuándo estará listo el proyecto? Todo depende del Congreso y la celeridad que le dé en una agenda legislativa atravesada por elecciones regionales. Pero la expectativa del superintendente Francisco Reyes Villamizar es que “avance rápidamente, en vista de los beneficios que tiene para el buen funcionamiento de las empresas del país y la gestión de la Supersociedades” (ver gráfico).
Así respondió el funcionario en diálogo con EL COLOMBIANO sobre este proyecto de ley que apunta a una mayor competitividad del país:
¿Cuáles son los cambios fundamentales que pretende el proyecto de ley?
“Se pretende modificar el sistema de gobierno corporativo, mediante la creación de unas reglas más claras para los administradores de las compañías, que sean más simples, haya más autonomía en la toma de decisiones, es decir, que haya menos presión sobre su capacidad decisoria y que pueda asumir una posición de riesgo con tranquilidad sin estar pensando en los riesgos legales que asume. Para ello se dan unos seguros sobre su actuación, como el reembolso en gastos de defensa jurídica, cuando resulte victorioso.
¿Qué contempla en cuánto a trámites de creación de empresas?
“Flexibilizar los requisitos de creación de los tipos de sociedades tradicionales como las anónimas (S.A.) y limitadas (Ltda.), sin necesidad de tantos formalismos y de manera más ágil. También se propone reformar algunos aspectos de las SAS, luego de seis años de vida de este tipo de sociedad (Ley 1258 del 2008)”.
¿Qué cambios?
Son varios, como que pueda ser adoptado para acometer cualquier actividad de explotación económica, excepto aquellas que requieren autorización de la Superintendencia Financiera”.
En la práctica, ¿qué garantías daría a los accionistas de cualquier sociedad?
“Se busca permitir una mayor protección de los accionistas minoritarios y que los acuerdos de accionistas se puedan hacer valer por parte de ellos. De igual manera, que se pueda reprimir cualquier abuso de un propietario mayoritario o minoritario que está bloqueando la actividad de la compañía. Asimismo todo individuo estará en obligación de reportar cualquier posible conflicto de interés, de manera que no se cree una indebida administración de los recursos, por ejemplo, que lleve el dinero de las compañías hacia el bolsillo de un controlante”.
¿En qué se fortalece la Supersociedades en sus tareas de vigilancia y control?
“Por ejemplo, se intentará que aumente la capacidad sancionatoria de la entidad con multas que puedan ser mucho mayores a las vigentes. Pero al mismo tiempo se pretende establecer procedimientos muchos más claros de cuándo y cómo se impone una sanción, y así agilizar los tiempos de las investigaciones y la manera de resolverlas, por ejemplo, con audiencias verbales. De esa manera, la Superintendencia podrá consolidarse como un centro eficiente y especializado de resolución de diferencias empresariales a distintos niveles como conciliación, arbitraje, resolución judicial de conflictos y, finalmente, resolución administrativa de conflictos”.
¿Este proyecto pone a tono a Colombia con estándares internacionales de la Ocde?
“El proyecto continúa el esfuerzo de modernización e internacionalización del sistema jurídico de sociedades para Colombia. Pero también la Superintendencia trabaja en otro proyecto de ley de soborno transfronterizo, que ya va para tercer debate en el Congreso y que es un requisito fundamental para el acceso de Colombia a la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (Ocde) -ver recuadro-.