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Renault-Sofasa le tiene fe al crecimiento vía exportaciones
Las complejidades que tendrá este año el mercado doméstico no son ajenas a la marca del rombo.
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Ariel Montenegro, presidente de Renault-Sofasa, habló acerca del plan de aceleración de exportaciones, especialmente a México, para mitigar la caída de la demanda en Colombia. FOTO Cortesía Renault
03 de febrero de 2023
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Los buenos resultados de Renault-Sofasa durante el año anterior contrastan con la incertidumbre de un 2023 lleno de retos en el mercado local, la inflación, la devaluación del peso y las altas tasas de interés están haciendo que para las familias colombianas cada vez sea más difícil estrenar carro.
Ante esto, la compañía no se queda quieta y confía en que mientras se resuelven los factores internos el mercado externo pueda ser el refugio que le permita, al menos mantenerse estable. Sobre estos asuntos EL COLOMBIANO conversó con Ariel Montenegro, presidente de Renault Sofasa.
¿Cómo cerró Renault el año anterior?
“En 2022, Renault tuvo un buen desempeño en Colombia, consolidando su liderazgo por quinto año consecutivo y liderando tanto en vehículos particulares como utilitarios. El modelo más vendido fue el Renault Duster producido en Envigado, con una participación del mercado del 20,9% y crecimiento en volumen del 4% en comparación al año anterior. Además, Renault se posicionó en el top 10 de los mercados mundiales en volumen. Esto nos dio da una mayor exposición interna dentro del grupo en un año que fue particularmente complicado para el mercado mundial.
Además, estamos muy felices por los resultados industriales: Renault-Sofasa tuvo un crecimiento del 25% en la producción en Envigado, impulsado por un aumento del 56% en las exportaciones en comparación con el año anterior (15.393 unidades, el 31% de la producción), lo cual es importante para su estrategia a mediano plazo de diversificación de la producción”.
¿Ese aumento de la producción tiene que ver con que mejoraron la capacidad o con el mejoramiento de las condiciones globales de suministro?
“El suministro global sigue siendo inestable, pero la empresa decidió aumentar la capacidad de producción en julio debido a una demanda y conquista de mercados fuera de Colombia, especialmente México, y aumentando la exportación de Logan y Stepway y la producción para el mercado de Ecuador.”
¿Ya esas cifras producción son mejores que antes de pandemia?
“Estamos en un nivel de comercialización ligeramente por debajo de antes de la pandemia, en términos de volumen. El mercado de vehículos en Colombia se encuentra ligeramente por debajo de los niveles previos a la pandemia, con un volumen de 238.000 unidades en los segmentos de vehículos particulares y utilitarios livianos, que es donde juega Renault. Sin embargo, buscamos seguir creciendo en ese volumen, especialmente en los mercados de exportación, y vemos oportunidades en México para compensar la contracción del mercado doméstico colombiano en los últimos meses.”
La penetración de mercado de Renault en Colombia supera incluso la que tiene la marca en Francia, ¿a qué se debe?
“El grupo Renault en Francia tiene una penetración del mercado mayor al 25% debido a las diferentes marcas que ofrece (Dacia, Renault y Alpine). Sin embargo, la marca Renault es especialmente exitosa en Colombia, con una penetración del 17,9% en comparación con otros 25 mercados principales donde opera. Por eso que el éxito de nuestra marca en Colombia es muy particular y es un motivo de orgullo”.
¿Y eso cómo se ha logrado mantener sabiendo que han entrado nuevos competidores con sus propuestas y con una buena reputación?
“Fíjate lo anecdótico de que el liderazgo de la marca Renault en Colombia comienza en 2018, lo cual es coincidente con el año en el que los acuerdos de libre comercio para la industria automotriz comienzan a tener aplicación y es un mercado abierto a nuevas marcas y condiciones de importación más favorables desde México, Estados Unidos, Canadá, Corea y Europa. En ese contexto Renault ha logrado mantener e incluso crecer su participación de mercado debido a su portafolio de productos adaptado para Colombia, con un acompañamiento de los segmentos de entrada y una combinación de adaptación de producto a la topografía, geografía y bolsillo de los colombianos. Sin embargo, producir en Colombia no es la única variable para ser líder en el país, también es necesario tener una buena estrategia de mercadeo, un buen posicionamiento de producto y una red de distribución sólida y experimentada, como la red de Renault en Colombia construida por Sofasa durante más de 50 años.”
Luego de la pandemia toda la industria automotriz ha experimentado un incremento en los precios, ¿esto ya ha empezado a resentir la demanda de vehículos?
“Sí, sin duda, vemos reflejado en la contracción del mercado en octubre, noviembre y diciembre, que ha sido causada por la devaluación y los incrementos en los precios de transferencia, así como un aumento significativo en las tasas de interés. Esto combinado con una ley de esfuerzo para las familias colombianas, que reciben prácticamente el mismo salario, hace que sea mucho más difícil adquirir un vehículo nuevo, lo que lleva naturalmente a una contracción del mercado. Lo vemos reflejado en el último trimestre del año 2022 y proyectado también en el primer semestre de este año. Aunque no vemos una caída tan fuerte en la intención de compra, lo que ha caído significativamente es la posibilidad de adquirir un crédito y confirmar la compra”.
¿Y esas condiciones qué significan para Renault en unidades?
“Lo proyectamos estables, no estamos proyectando un crecimiento, si el año pasado llegamos a 49.500 unidades podría ser similar este año. En cuanto a participación de mercado será la resultante en función del tamaño del mercado, nosotros apuntamos a colocar aproximadamente el mismo volumen de unidades en 2023.
¿Y frente a precios?
“Creo que aún la carrera de precios no ha terminado. Aun vemos al dólar recuperándose ligeramente, mientras que el euro no tanto. La matriz de compra de insumos para la producción automotriz es muy diversa, con dependencia del dólar, el euro, el yen, el peso colombiano y la inflación en el mercado colombiano. Al producir localmente, también debemos tener en cuenta los cambios en las tasas de interés y los costos de financiamiento. En este escenario, el precio final dependerá de cómo se muevan estas variables. Sin embargo, hay algunos factores internacionales alentadores, como el hecho de que los costos de los fletes marítimos han dejado de subir y algunos precios de commodities, como el acero, han disminuido ligeramente”
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