Está en su derecho la alcaldesa de Barranquilla, Elsa Noguera, de reclamar lo que considera un pago debido a su municipio, derivado de negocios inmobiliarios de la cementera Argos. Pero se apresura la popular alcaldesa en acusar a la empresa de evadir impuestos, pues Argos manifiesta que la estampilla cuyo pago se echa de menos fue anulada por el Consejo de Estado. Hay que esperar que los tribunales diriman esta controversia. También es desacertado que la alcaldesa quiera plantear este tema como un lío regional de paisas contra costeños. Eso es desviar el debate
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6
