En 1995 la compañía japonesa NTT Docomo incorporó un corazón en los mensajes de su modelo de beeper Pocket Bell; ese quizá fue el primer paso para el uso de los emoticones. Pero fue Shigetaka Kurita el encargado de diseñar la primera colección de emojis con 176 imágenes de 12 x 12 píxeles lanzada en 1998.
Los emojis, que han ido evolucionando en diseño e inclusión, además han influenciado el lenguaje escrito. “En términos de escritura los idiomas occidentales están basados en el alfabeto griego, es por eso que el uso de emojis es un avance significativo para nuestro lenguaje pues hace mucho dejamos de leer pictogramas, pero en la cultura oriental por ejemplo el uso de este tipo de caracteres tiende a ser más eficiente, pues la mayor parte de sus alfabetos no son letras, si no que expresan ideas completas. En ese caso, para los orientales es más fácil expresar ideas a través de emojis que para nosotros” dice Santiago Villegas experto en cultura digital.
La inclusión social y diversidad también hace parte de esa evolución de los emojis. En la versión iOS 10 de Apple y en la actualización del teclado Unicode, por ejemplo, aparecen nuevas figuras como las de mujeres cumpliendo el papel de deportistas o detectives, que en versiones anteriores aparecía solo en figuras masculinas.
También se agrega la posibilidad de cambiarle el color a los personajes humanos para generar una identidad racial, y la diversidad de las familias mostrando figuras que representan las relaciones familiares no convencionales.
Para Camilo Rengifo, estratega digital y abanderado de la comunidad Lgbti, estas representaciones son una apuesta por la diversidad. “Es reconocer que existen grupos poblacionales diferentes y que por tanto deben ser representados en los entornos digitales. Todo respeto empieza reconociendo que el otro existe” concluye.
Para Villegas, en términos de lenguaje, considera que puede ser poco práctico para la comunicación la diversificación de emojis. “El exceso de diversidad puede limitar la capacidad de comprender las imágenes como lenguaje universal, y cuando le agregamos más signos, símbolos y significados, esa comunicación se vuelve más compleja.”
La petición de más emojis
El mundo occidental se debate entre el uso o no del velo musulmán, en su lucha por sentirse identificado e incluído en las plataformas digitales.
Rayouf Alhumedhi, una joven alemana de origen saudí, hizo una petición para la creación de un emoji con el hiyab. En la petición que hizo la mujer a Unicode dice: “casi 550 millones de mujeres musulmanas en este planeta se sienten orgullosas de llevar el hiyab. Sin embargo, no hay un solo espacio del teclado reservado a ellas”.
Según BBC, mientras Alhumedhi chateaba con un grupo de amigas a través de Whatsapp, se dio cuenta de que no existía ningún emoticón que la representara y en ese momento fue que sintió la necesidad del ícono.
Ya en 2014 Tim Cook, CEO de Apple, había hecho la solicitud a Unicode para que fueran incluídos emojis de etnias africanas y asiáticas.
Emoji vs Emoticon
Existe una diferencia considerable entre los términos emoji y emoticón; aunque popularmente se crea que significan lo mismo.
Un emoticon combina diferentes caracteres para mostrar una emoción humana, como estos: :-) :-(
Los emojis, por su parte, son imágenes gráficas que representan ideas, estados de ánimo y objetos; además están ligadas directamente a los teclados de los télefonos móviles o a la posibilidad de ser usados en distintas aplicaciones..