Ocho demandas se hicieron en diferentes tribunales federales de Estados Unidos después de que la compañía tecnológica Apple informara que ralentiza dispositivos antiguos que tienen problemas con sus baterías para que estas no afecten el desempeño de los equipos en los picos de productividad.
Según informó la agencia de noticias Reuters, se argumenta que ese acto voluntario de la compañía con sede en Cupertino, California, llevó a los usuarios de los teléfonos a intentar resolver en vano los problemas con sus equipos.
Las demandas se presentaron en tribunales de los estados de California, Nueva York, e Illionis y esperan sumar más propietarios inconformes con las medidas que tomó Apple para realizar una demanda colectiva. Sin embargo, según informó la empresa a AFP, la decisión de ralentizar los teléfonos fue para protegerlos de terminar siendo inservibles.
Reuters también informó que en Israel se presentó una demanda similar y que Apple no respondió a la solicitud de ellos pidiéndoles comentarios sobre estos casos.