Aunque no se sabe qué es, astrónomos presentaron el mapa más detallado y exacto de la distribución de la materia oscura en el universo, ratificando que 26 % de este está compuesto por este tipo de materia y 70% por la esquiva energía oscura.
El avance logrado con el programa conjunto Dark Energy Survey (DES) concuerda mucho con las proyecciones realizadas por el Planck, logrando entender más cómo ha sido la evolución del universo en casi 14 000 millones de años.
“Los resultados son más que satisfactorios”, dijo Scott Dodelson, del laboratorio Fermilab, uno de los científicos del proyecto. “Por primera vez fuimos capaces de ver la actual estructura del universo con la misma claridad que vemos su infancia, y pudimos seguir sus hilos de uno en uno, confirmando varias predicciones que se han hecho”.
Y aunque resulte extraño, es más fácil medir la distribución en el pasado lejano que hoy. En los primeros 400 000 años tras el Big Bang, el universo estaba lleno con gas resplandeciente, una luz que sobrevive hasta hoy. El mapa de Planck de esa radiación de fondo de microondas da una foto de ese universo inicial. Desde entonces, la gravedad de la materia oscura ha juntado masa y creado ‘motas’. Pero la energía oscura ha estado luchando, apartando esa materia. Con el mapa como inicio, los cosmólogos pueden calcular con precisión cómo se ha desarrollado la batalla durante 14 000 millones de años.
En este primer análisis del DES se analizó 1/30 del cielo y en una nueva campaña que empieza este mes se rastreará 8% en un lapso de 5 años.
Los científicos midieron la forma de 26 millones de galaxias, detallando la materia oscura a lo largo de miles de millones de años.