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El celular se lleva a todas partes. Este dispositivo móvil permite varias cosas al tiempo: llamar, chatear (por aplicaciones de mensajería), ver series o películas y crear listas de reproducción. También se convirtió en una popular consola de videojuegos, sin ser consola.
Y es que se juega a cualquier hora del día. Según el Estudio de Consumo Móvil Colombia 2020 de la firma Delloite, los colombianos encuestados dijeron que suelen hacerlo mientras se relajan en casa (56 %), antes de dormir (43 %), cuando miran televisión (31 %) y en viajes (22 %).
“Con el auge que tienen hoy en día los teléfonos inteligentes, cada vez son más los desarrolladores de videojuegos que han optado por utilizar este dispositivo móvil como la plataforma para hacer crecer sus negocios, ya sea ofreciendo estos videojuegos de forma paga o gratuita”, se lee en el informe.
Otro dato: la mayoría de los encuestados prefiere jugar como único jugador, es decir, retándose a sí mismo (70 %), sin embargo, los porcentajes de interacción con otras personas por medio de videojuegos no son menores: multijugador con amigos y familia (35 %) y multijugador con otros jugadores (29 %). Además, los tipos de videojuegos de aventura (Call of duty) y casuales (Candy Crush) son los preferidos por los encuestados (ver gráfico).
Constante evolución
Para Jorge Mario Karam, docente de la Universidad Sergio Arboleda, la evolución de las funciones de los celulares que ofrece el mercado ha logrado que los juegos en móviles también se transformen y logren una “vanguardia tecnológica”. En otras palabras, ha permitido que esas experiencias dejen de ser exclusivas de las consolas y computadores.
Explica que a mediados del año 2010 los desarrolladores se dieron cuenta que el celular podía tener su propio nicho de jugadores con títulos donde el usuario se encontrara con otras oportunidades como mayor comodidad en términos de jugar con una sola mano o poder interactuar con el escenario.
“Los juegos en el celular procuran ser muy dinámicos y no hay tiempos de carga nulos, es decir, se comienza de una. Son experiencias rápidas y cortas (capítulos puntuales), los ecosistemas usan colores muy vivos, también buscan que sean muy intuitivos”, dijo el docente.
Por su parte, Sandra Castro Pinzón, CEO de Tan Grande y Jugando, organización que fomenta el desarrollo de videojuegos en Colombia, indica que es un hecho que los jugadores de las consolas han migrado a los móviles y un ejemplo de esto es la adaptación de propuestas tan populares como Fortnite que ahora también se juega desde el celular.
Dice que hay juegos que “adaptan incluso algunas mecánicas” y otros que son desarrollados exclusivamente para consumo móvil. “En estos la gente, además de competir, crea comunidad y construye con ayuda de otras personas, un ejemplo de este estilo es el juego Genshin Impact”.
Otro avance ha sido la llegada de juegos que usualmente son de mesa o de la vida real y fueron trasladados al móvil: hay versiones de los tradicionales Solitario, Parqués (Parchís) y Sudoku, así como los rompecabezas, ajedrez y libros para colorear. “En estos los jugadores quieren retarse a sí mismos o no estar aburridos en los momentos donde tienen que esperar”.
Destaca que en Colombia los desarrolladores están generando contenidos de alta calidad que incluso han recibido reconocimientos internacionales como es el caso de World War Doh, que obtuvo el “Best of 2017” de Apple en la categoría de Tecnología e innovación y el “Best in Show: Audience Choice” en el Casual Connect USA (ver recuadros).
Ella agrega que, según Newzoo (empresa de datos de juegos y deportes electrónicos), Colombia es el cuarto país de Latinoamérica, después de México, Brasil y Argentina, donde más se exporta videojuegos, incluyendo juegos móviles. De acuerdo con la compañía, en 2020 los ingresos del país fueron de 417 millones de dólares.
Públicos y gustos
De acuerdo con Karam, un elemento que hace que los usuarios pasen varias horas del día jugando en sus celulares es la estrategia de gamificación, es decir, el querer aprender algo mientras se divierte.
“Los juegos en los celulares no se pueden ver como un enemigo, detrás de muchos hay una propuesta pedagógica y una aplicación interesante desde lo social, la invitación es a conocerlos, ya no es lo mismo que cuando se jugaba la culebrita. La invitación es a estar abiertos y tener curiosidad porque se pueden encontrar con escenarios fascinantes”, agregó.
Por su parte, Castro dice que otra razón importante que lleva a que a las personas les gusta tanto jugar en el dispositivo móvil es el componente del constante reto que ofrecen algunos juegos, debido a que “los seres humanos somos competitivos por naturaleza y en estas propuestas se encuentra eso”.
Explica que las apps que le llaman más la atención a los niños son las que les permiten crear recetas culinarias en las que al final reciben una calificación de acuerdo a su plato (Cooking Mama), también aquellos que los miden y los obligan a tener que completar estructuras o encontrar objetos. “Esta categoría no posee anuncios ni compras”.
Agrega que a los menores les gusta experiencias como, por ejemplo, Minecraft y Roblox en las que construyen sus mundos y tienen la posibilidad de armar estructuras poniendo a prueba la lógica.
“Es importante que los adultos presten atención a qué juegan los menores de 12 años en el celular, porque esta es una herramienta peligrosa en la que pueden ser víctimas de algún delincuente”, señala la experta.
En el tipo de público jóven se destacan aquellos juegos en los que pueden crear comunidades desde el dispositivo móvil, como es el caso de Fortnite (tipo batalla), donde pueden hablar con los integrantes del equipo e interactuar, “tienen funciones de chat para conversar”.
“Actualmente se ven muchos juegos como servicio (invitan a una gestión social), aquellos en los que el personaje evoluciona y los de estrategia en términos de combate, todos en general tienen en común que son experiencias fáciles y rápidas para el usuario”, indica Karam.
Un grupo más son las mujeres adultas, a quienes les gustan los juegos solitarios de retos mentales que las obligan a solucionar problemas como armar rompecabezas y otros que les permita colorear.
Un aspecto que resalta el profesor son los juegos de servicio, que son aquellos donde el usuario siente que son gratuitos, pero la monetización aparece cuando se quiere tener ciertos objetos, herramientas para mejorar el personaje o pasar a otros niveles. “Esto se siente muy orgánico en los celulares”.
Según Delloite, la mayoría de los colombianos encuestados dijo que realiza compras dentro de los juegos para evitar interrupciones al momento de jugar (52 %), eliminar las limitaciones de tiempo para seguir jugando (48 %), comprar contenido exclusivo (46 %), obtener acceso a un nuevo nivel o área (46 %) y obtener aceleraciones (34 %).
“La calidad de los videojuegos sobre esta nueva consola mejoró el ritmo de evolución en el hardware de este dispositivo, el cual ha avanzado notablemente año tras año, con fabricantes que compiten por ofrecer procesadores más potentes y pantallas más brillantes y de mayor resolución”, dice la firma.
Es un hecho que el teléfono inteligente y los videojuegos se complementan para entretener a los usuarios de todas las edades, una relación que parece seguirá consolidada en los próximos años.
Juegos móviles “Made in Colombia”
World War Doh
Fue producido por Jam City en Bogotá. Es de estilo competitivo, por lo tanto requiere habilidad para derrotar a los rivales. El modo de funcionamiento es multijugador en tiempo real, es decir, dos personas se enfrentan entre sí. El objetivo es combinar los personajes (en plastilina) del juego con sus armas. Ha recibido varios reconocimientos internacionales.
Vs Experience
Esta plataforma social de entretenimiento desarrollada por Indie Level Studio (Medellín) le brinda la posibilidad a los usuarios de medir sus habilidades y destrezas a través de siete categorías para lograr los mejores puntajes en diferentes retos como: runner (recorridos), supervivencia, trivia, estrategia, entre otros. Está disponible para iOS y Android.
Malu y los acertijos
Es de aventura y creado por la empresa bogotana Shift Active. Los usuarios pueden aprender sobre la cultura indígena y campesina colombiana. Tiene una heroína femenina (etnolingüista) que debe buscar los acertijos que permitan recuperar la memoria histórica del país y no permitir que ‘Olvido’ (antagonista) se robe la memoria de la gente. Se compone de 10 niveles.