La primera muerte en Europa se registró en Francia, lo anunció este sábado la ministra de Salud de este país, Agnès Buzyn. Se trata de un turista chino de 80 años que llevaba varias semanas hospitalizado en París. En los últimos días su salud se había “degradado rápidamente”. El paciente falleció el viernes.
El fallecido era de la provincia de Hubei, foco de la epidemia que tiene en jaque a China, y donde en las últimas 24 horas se aumentaron las muertes en 139. Allí ya han fallecido 1.596 personas, informó la Comisión Provincial de Salud de esa región centro-oriental del país.
En Hubei se contabilizaron además 1.843 nuevos casos de Covid-19, como se le ha denominado a esta epidemia, lo que eleva a 56.249 el número de casos detectados hasta ahora en dicha provincia.
Las autoridades chinas informaron la semana pasada de un cambio en los criterios de diagnóstico para confirmar los casos, lo que disparó el balance de afectados por el coronavirus, que ayer dejaba ya en toda China 1.523 muertos y 66.492 casos confirmados, según los últimos datos oficiales a nivel nacional.
Según el último parte, el sábado se sumaron 143 nuevos decesos al balance total, así como 2.641 casos confirmados; y habían sido dadas de alta más de 8.000 personas tras superar la enfermedad.
Aunque las autoridades provinciales no han proporcionado muchos más detalles sobre los últimos criterios para contabilizar a los enfermos, las nuevas medidas permitirán “a los pacientes recibir un tratamiento a tiempo”, indicó en un comunicado la comisión.
Antes, los pacientes se confirmaban por medio de unos test, realizados con unos equipos que escasean en la provincia y ahora los médicos parecen tener más atribuciones para poder confirmar los casos.
Fuera de China
Hasta la fecha, todos los decesos menos cuatro –en Japón, Francia, Filipinas y Hong Kong– se han producido en la China continental y, aunque una treintena de países cuentan con casos diagnosticados, China acapara en torno al 99 % de los infectados.
Sobre el hombre que murió en Francia, se sabe que había llegado a este país el 16 de enero y después de presentar los primeros síntomas fue hospitalizado y aislado desde el 25 de enero. En los últimos días se encontraba en reanimación. Su hija también está infectada, pero está en recuperación y, según dijo la ministra de Salud, se espera que salga próximamente.
En Francia cuatro pacientes han sido dados de alta y seis siguen hospitalizados, aunque no preocupan, precisó Agnès Buzyn.
Los síntomas del nuevo coronavirus son en muchos casos parecidos a los de un resfriado, pero pueden estar acompañados de fiebre y fatiga, tos seca y disnea (dificultad para respirar).
