Su obra “es epítome del renacimiento de un arquitecto con un mayor compromiso social”.
El premio fue anunciado el miércoles por Tom Pritzker, presidente y director de la junta directiva de la Fundación Hyatt, con sede en Chicago, que auspicia el premio. Aravena, de 48 años, es el primer ganador chileno del Pritzker y el cuarto latinoamericano, tras el mexicano Luis Barragán (1980) y los brasileños Oscar Niemeyer (1988) y Paulo Mendes da Rocha (2006).
Aravena trabaja a través del colectivo Elemental, que dirige en Santiago y se centra en proyectos de impacto social e interés público.
Esta labor comprometida está reflejada en la labor de reconstrucción de la ciudad de Constitución, una de las más devastadas por el terremoto y el tsunami que el 27 de febrero de 2010 sacudió Chile y dejó medio millar de muertos y unos 800.000 damnificados.
También han diseñado el Paseo Metropolitano, aún en construcción, y el Parque Bicentenario de la Infancia (2012) en Santiago.
La entrega del Pritzker 2016 se celebrará el próximo 4 de abril en la sede de Naciones Unidas de Nueva York, uno de los edificios más emblemáticos del brasileño Oscar Niemeyer.
Al anunciar su fallo el jurado destacó que “pocos han cumplido las exigencias de ejercer la arquitectura como una labor artística al tiempo que enfrentan los desafíos sociales y económicos. Aravena (...) ha logrado ambos y al hacerlo ha expandido significativamente el papel del arquitecto”.
Mencionó, entre otros, cinco edificios que Aravena ha diseñado para su alma máter, la Universidad Católica de Chile, incluyendo las facultades de matemáticas y medicina y su Centro de Innovación Anacleto Angelini de 2014, una estructura opaca de concreto con un gran patio interior iluminado por enormes ventanales.
“Parece una estructura poderosa desde la distancia, pero es excepcionalmente humana y acogedora”, dijo el jurado, que destacó que el diseño único asegura que el consumo de energía sea mínimo. El diseño también incluye “muchos espacios para encuentros espontáneos y una transparencia que permite observar la actividad en su interior”, señaló el jurado.