A causa de un movimiento de masa en el barrio Olaya Herrera, occidente de la ciudad, 44 estructuras, entre las que había dos locales comerciales, fueron evacuadas de forma definitiva de acuerdo con la recomendación de las autoridades.
Las acciones preventivas se realizaron en la mañana de este sábado 27 de marzo y el equipo social del Dagrd atendió a 110 personas pertenecientes a 32 familias y 18 de estas ya se encuentran en albergues.
De acuerdo con Jhon Ocampo, funcionario del Departamento de Atención de Emergencias de Medellín, Dagrd, el movimiento de suelo que comenzó en las primeras casas de la ladera ubicadas en la corona podría generar riesgo para las demás viviendas ubicadas más abajo, por lo que se debieron evacuar. Encontraron, contó, viviendas inclinadas y agrietadas.
El Siata hizo presencia en el lugar para instalar sensores que monitorean el movimiento del suelo para determinar cuál es el alcance de la amenaza, mientras que el Dagrd hizo control del perímetro para detener una fuga de agua que podría tener relación con el hecho y para cortar el suministro eléctrico del sector.
“Por ahora se están tomando las acciones iniciales, pero debemos esperar hasta el día lunes para saber cómo se comporta el suelo. Solo hasta ese día el Siata nos dirá si hay riesgo de colapso y afectación de otras casas y tendremos información más oficial”, puntualizó Ocampo.
El Centro de Bienestar Animal La Perla también se presentó y rescató dos gatos y cuatro perros.
Los afectados, mientras tanto, tienen más preguntas que respuestas. José Ragas contó a EL COLOMBIANO que inicialmente, hace aproximadamente cinco meses, una casa presentaba algunas fracturas que creyeron era por falta de columnas.
“El dueño mandó a reforzar con columnas pero luego la casa vecina del segundo piso también tuvo grietas. Desde ahí se analizó y vieron que eran más casas, posiblemente por el terreno y se ha empeorado por las lluvias de los últimos días”, dijo.
La casa de Ragas, aunque no tiene grietas ni inclinaciones, fue evacuada, como otras, por posibles riesgos y cercanías. “La de arriba está agrietada y podría caerse sobre nosotros”.
Además, les preocupa qué pasará con las familias con niños y adultos mayores. Por ahora, algunos recibieron apoyo con arriendo por tres meses, de los cuales uno podrá ser en hotel, pero aún no tienen claridad sobre la evacuación de sus pertenencias.