Casi dos meses después del inicio oficial de las investigaciones por el presunto abuso sexual de 14 menores de edad en el Centro Infantil Exploradores B, en Santa Cruz, 60 niños y niñas retornaron este lunes a una sede nueva de Buen Comienzo.
El nombre del lugar es “Dejando Huella” y el personal que lo operará ha sido renovado, según Hugo Díaz, director (e) de la Unidad Administrativa del programa. Entre las innovaciones se cuenta la instalación de un sistema de cámaras de vigilancia al que tendrán acceso las familias de los menores.
Son siete los equipos que estarán en la parte interna y uno más en el exterior. Dicha tecnología permitirá monitorear las personas que salen e ingresan a la sede, según Díaz, el cual precisó que están dadas las garantías para retomar la prestación del servicio en Santa Cruz y que, pese a lo ocurrido, las familias de los menores puedan estar tranquilas.
Lo anterior, sin embargo, fue desvirtuado por una de las madres afectadas por los abusos cometidos, presuntamente, por Ismael Darío Lopera, alias “Manolo”. La mujer, quien prefirió reservar su nombre, describió que una nueva sede no remediará lo sucedido con su hijo.