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Polémica por autorización para comercializar pólvora en Rionegro
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Las autoridades de Antioquia esperan un “buen comportamiento” de la gente en los días más críticos: 24 y 31 de diciembre. FOTO: Róbinson Sáenz.
Mientras Antioquia sigue siendo el departamento con el mayor número de quemados en Colombia, al sumar 78 casos de 258 a nivel nacional, en el municipio de Rionegro continúa vigente el decreto que permite el uso y distribución de artículos pirotécnicos con algunas restricciones.
Al respecto, la secretaria de Gobierno, Ester Lucía Gómez Zapata, explica que “no es que Rionegro sea el que permite la pólvora, sino una ley nacional (ley 670 de 2001), por lo que a nosotros nos toca reglamentar esa situación”.
La localidad ha estado en el centro de una reciente polémica, debido a que los municipios vecinos no están buscando normatizar, sino prohibir. La Corporación Autónoma Regional de las Cuencas de los Ríos Negro y Nare (Cornare), lanzó desde el 30 de noviembre la campaña “Libélula 2015: todos por un Oriente libre de pólvora”, con el propósito de “generar una conciencia sobre el daño que se causa a las personas y al ecosistema con el uso de la pólvora”.
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Javier Valencia González, subdirector de Servicio al Cliente de Cornare y vocero de la campaña, le comentó a EL COLOMBIANO que el plan Libélula comenzó en la temporada navideña de 2014, cuando la estadística registraba 76 quemados y cinco incendios al parecer provocados por globos en la subregión.
Se trazaron como objetivos reducir esas afectaciones en un 20%, y a su juicio lo lograron, así como proteger del ruido a la fauna doméstica y los caballos, y garantizar que no se explotaran estos objetos en proximidades de hospitales y ancianatos.
Para la presente temporada, todos los alcaldes del Oriente firmaron el pacto Libélula, menos el de Rionegro. “Allá todavía se ven los expendios, porque es legal, pero no perdemos la esperanza de que en el futuro cercano apliquen las restricciones, creemos que la pólvora se debe erradicar”, expresa Valencia.
El decreto sobre pólvora
La secretaria Gómez comenta que la estrategia les ha funcionado. “Vimos que pese a tanta campaña, la gente seguía las ventas informales y sin control. Entonces reglamentamos cuáles son los lugares que pueden expender, los cuales tienen que cumplir con parámetros del Cuerpo de Bomberos, Gestión del Riesgo y la Secretaría de Salud”, añade.
Oswaldo Enrique Osorio Orozco, secretario de Salud del municipio, cuenta que a la fecha se han registrado cuatro casos de lesiones con pólvora (tres adultos y un niño de 11 años); en el mismo periodo de tiempo del año pasado, el registro iba en siete afectados.
Gómez señala que su municipio sí suscribió un pacto, pero con la Gobernación de Antioquia. Se trata de un “compromiso para la protección de los ciudadanos frente a los riesgos del uso de pólvora”, firmado el pasado 25 de noviembre. Al acto asistió de testigo la delegada de la Procuraduría de Infancia y Adolescencia y se logró la signatura de Rionegro, El Retiro, La Unión, Argelia, Guatapé, El Santuario, San Carlos, San Luis y otros como Medellín, Bello y Envigado.
“Ese pacto era para la protección de las personas, no de prohibición. Nuestra maneja de proteger es evitando las ventas clandestinas por medio de la reglamentación, que además es algo que viene por un ley del orden nacional”, dice Gómez.
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El decreto que regula la pólvora en la localidad del Oriente es el N°392, expedido el pasado 20 de noviembre. El documento, signado por el alcalde Hernán Ospina Sepúlveda, permite el uso, transporte y distribución de artículos pirotécnicos o fuego artificiales, siempre y cuando quienes lo hagan tramiten un permiso legal y cumplan con requisitos, como formularios de registro tributario, visto bueno del Cuerpo de Bomberos y demás.
El mismo decreto impone multas de 1 a 5 salarios mínimos para los padres de familia que permitan la manipulación de pólvora por parte de niños, incluyendo las famosas luces de bengala. Si resultan lesionados, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar será notificado.
También se prohiben las ventas ambulantes y estacionarias de estos elementos en espacios públicos, el transporte de los fabricados de manera artesanal y aquellos que contengan fósforo blanco y otras sustancias restringidas por la ley.
Tampoco se pueden elevar los populares globos de mecha ni quemar los muñecos de Año Viejo, “y en general todo tipo de elementos que causen combustión que sea nociva para la salud de las personas y del medio ambiente”, dice el texto.
Cornare sigue haciendo campañas en la localidad, a las cuales se sumaron la Policía y las Diócesis de Rionegro y Sonsón.
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La Fuerza Aérea, por medio del Comando Aéreo de Combate N°5, adelanta una estrategia para generar consciencia en la población rionegrera y sus vecinos. Desde helicópteros están haciendo perifoneo y lanzando volantes, invitando a “prender la fiesta de Navidad sin pólvora”.
Osorio reitera que la Administración seguirá con sus campañas en las instituciones educativas y con las familias, “llevándoles el mensaje para que no usen ellos la pólvora, sino que dejen eso en manos de los profesionales”.
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