La Fiscalía General de la Nación, a través de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos, lideró cuatro acciones simultáneas realizadas en diferentes puntos del país contra los principales fenómenos criminales que inciden en el deterioro de los recursos naturales y ponen en riesgo la sostenibilidad de las comunidades.
El ente acusador explicó en un comunicado que en una operación articulada del CTI y el Ejército Nacional en Caucasia, Bajo Cauca antioqueño, fue descubierto un frente de extracción ilícita de oro, en el que motores succionaban material mineral del Río Man.
“En el lugar se constató el vertimiento indiscriminado de mercurio a la fuente hídrica que abastece al acueducto de la región, por lo que peritos especializados tomaron muestras para establecer el grado de contaminación del agua y la posible afectación a la comunidad”, se lee en el texto.
Durante las diligencias fueron incautados cinco motores y capturadas siete personas, entre ellas los administradores del entable.
Un fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos imputó a los detenidos los delitos de explotación ilícita de yacimiento minero, daños a los recursos naturales, contaminación ambiental y concierto para delinquir.
En otros procedimientos ejecutados en la Amazonía colombiana, Norte de Santander y Atlántico otras 11 personas fueron capturadas y se incautaron motores, maquinaria e insumos.
En la Reserva Nacional Natural del resguardo Nukak Makú fue encontrado un vivero con 80.000 matas de coca; mientras que en el Catatumbo se desarticuló una red de tráfico de madera que obtenía permisos ilegalmente de diferentes corporaciones autónomas del país. En el Atlántico fue intervenido oro entable minero.