No importó que, de un día para otro, el barrio La Loma del corregimiento San Cristóbal se llenara de policías y soldados. El miedo ya estaba inoculado en la gente de este sector del occidente de Medellín.
Por eso hoy, pese a las promesas de protección de los uniformados e instituciones públicas, 40 familias salieron desplazadas de sus casas por culpa de la guerra entre los combos delincuenciales.