Cuando Dominique y René Torá partieron desde Marsella (sur de Francia) a Cartagena, lo hicieron con la convicción de pasar placenteros días de descanso en una ciudad Patrimonio Histórico de la Humanidad y que todos los días ocupa un espacio entre las principales revistas y agencias de viaje como destino ideal para vacacionar.
La tarde del viernes 5 de mayo, permanece intacta en la memoria de esta pareja de pensionados que llegaron hasta las playas de La Boquilla, al norte de la ciudad, para disfrutar del mar y del clima caribe. Allí, un grupo de jóvenes le brindaron de manera “espontánea” el servicio de guía y les ofrecieron un carpa a la orilla de mar y una variada oferta gastronómica para que disfrutaran de su estadía.
La pareja pidió dos bandejas de pescado con mariscos, una limonada de coco, tres cervezas y dos botellas de agua. Al finalizar la tarde y cuando ya se disponían a marchar, pidieron la cuenta. De viva voz, uno de los jóvenes expresó que el total de la cuenta eran $850 mil pesos. Visiblemente sorprendidos, los turistas optaron por rechazar el precio y cancelar $100 mil pesos por todo lo que habían consumido.
“Los jóvenes nos abordaron desde el autobús. Uno de ellos nos comentó que habíamos llegado a una playa muy agradable, que habían muy buenos restaurantes de pescado, que su madre cocinaría para nosotros y nos llevó hasta la playa”, contó Dominique.
Los esposos Torá nunca observaron la lista de precios oficiales que fue concertada durante la Semana Santa, entre el gremio de restauranteros y la Alcaldía Local de la Virgen y Turística. No obstante, Carlos Arturo Jiménez, propietario del restaurante ‘El Rey Arturo’ explicó que los turistas cayeron en manos de los famosos ‘pide pide’ y que él sólo les cobró 60 mil pesos como total del consumo.
“Llegué a la carpa y en cuanto vi la discusión traté de mediar porque el nombre de mi restaurante está de por medio. Ellos me dijeron que cuánto me debían por lo que les había ofrecido y les dije que 60 mil pesos. Él sacó dos billetes de 50 mil y me canceló lo que me debía”, indicó a Caracol radio.
Lo que sorprendió a los extranjeros fue que en su país los restaurantes gastronómicos ni siquiera se acercan en precios a los que les querían cobrar en La Boquilla. “En Francia no hemos pagado nunca un precio tan elevado por un platillo y son restaurantes gourmet, de alto nivel”, indicó Dominique.
Dominique y René Torá fueron atracados con cuchillo y despojados de sus pertenencias antes de abandonar la playa. “Fue un grupo de muchachos, unos seis o ocho, nos intimidaron y forcejearon con nosotros. Nos quitaron un bolso donde teníamos tarjetas de crédito, licencias de conducción, celular, gafas y $102.000 pesos”.
Los franceses interpusieron la respectiva denuncia ante la inspección de La Localidad Uno, en Bocagrande. Por ahora, miembros de la Sijin realizan las investigaciones pertinentes y al parecer, los jóvenes que participaron del robo están plenamente identificados.