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“Me siento tranquila con lo acordado”: Sandino
Victoria Sandino, una de las mujeres de las Farc que estuvo en la mesa de Cuba, habló de lo pactado.
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Victoria Sandino lideró el tema de genero en las conversaciones de las Farc y el Gobierno en La Habana. FOTO Esteban Vanegas
20 de septiembre de 2016
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En diálogo con EL COLOMBIANO, Victoria Sandino, integrante de las Farc y asistente a la Décima Conferencia de ese grupo subversivo, quien estuvo en las negociaciones con el Gobierno en Cuba, dice que está tranquila con lo logrado en las conversaciones, pero como todos los guerrilleros, teme por los grupos armados que podrían atacarlos tras su desmovilización.
¿Fue importante escuchar a las víctimas?
“Todos los relatos de las personas que allí acudieron, los distintos representantes de las víctimas de todo el país, de quienes hemos y han causado afectaciones a la población, fue bueno escuchar esos relatos, encontrarnos con esa realidad de violencia. También fue un poco impactante”.
¿Cómo tomó o qué causó en usted escuchar estos testimonios?
“Fue tremendo porque es el dolor, es decir, el dolor no tiene ni color, ni partido, ni raza ni ideología. Es dolor, es uno solo, el dolor lo siente quien ha padecido la violencia que hemos vivido en Colombia por más de 50 y tantos años”.
Las Farc están pidiendo perdón. ¿Lo hacen por moda o convicción?
“Realmente no es una moda, es producto de lo que hemos alcanzado en el acuerdo final a lo largo de este proceso de paz y que corresponde. Es la puerta que nos va a conducir, entre otros aspectos, a la reconciliación nacional. El perdón es un asunto individual, pero hay que reconocer los daños que se han causado, y entre esos por supuesto las Farc, que hemos estado por más de 50 años alzados en armas, los hemos hecho. No ha sido nuestro propósito pero sí hemos causado afectación a la población de algunos grupos de colombianos a lo largo de este conflicto”.
Muchos de los guerrilleros acá presentes aseveran que no se arrepienten de lo que han hecho y dicen que no tienen por qué pedir perdón. ¿Esto no va en contra del proceso? ¿Deben concientizarse más los guerrilleros de este acto?
“Lo que ocurre realmente es que ninguno de los integrantes de las Farc-EP nos arrepentimos de habernos alzado en armas, de eso no hay ningún tipo de arrepentimiento por haberlas tomado para realizar algún cambio, para hacer resistencia a un régimen militarista que aún lo sigue siendo. Ahora, otra cosa es la afectación que se produce y se ha causado, incluso a gente del mismo pueblo. Eso sí nos duele y tenemos toda la disposición de reconocerlo y resarcir a las víctimas”.
Ustedes están preocupados por la seguridad y lo han manifestado varias veces. ¿Por qué temen que les suceda lo mismo que ocurrió con la Unión Patriótica?
“Hay que reconocer que el régimen colombiano históricamente ha incumplido lo pactado. Ahora, ¿qué es lo que nos hace arriesgarnos a lo que hemos logrado en este acuerdo? Es la disposición, la certeza de que Colombia no puede seguir por el despeñadero de la guerra, entonces tanto la clase dominante, la institucionalidad y los sectores populares tenemos que ser conscientes de lo que ha significado la guerra y lo que significa un país distinto, es decir, un país en paz. Ese consentimiento nos plantea, y lo estamos debatiendo en la conferencia, el nuevo reto: Colombia tiene que ir a la paz y la forma como hemos llevado el proceso, como se produjo con la comunidad internacional pues nos da ciertas garantías, más todo lo pactado, de que esta vez puede ser”.
En un país de más de siete millones de víctimas donde la mayoría son mujeres, ¿qué decirles a esas madres que han venido hasta acá a buscar a sus hijos, que han venido buscando respuesta por sus desaparecidos?
“Como ya lo he dicho anteriormente, las víctimas estuvieron en el centro del proceso y ahora están en el centro del acuerdo. Ahora viene la gran tarea por la implementación de lo pactado. ¿Qué le puedo decir a las víctimas? Pues que justamente tenemos un campo de acción grande, que debemos trabajar por lograr la materialización de esos acuerdos. Eso va a resarcir a esas víctimas que lo han perdido todo, incluso la vida de sus seres queridos”.
Si una mujer llegara a hablar con Victoria Sandino y le reclamara por su hijo, y les dijera a las Farc que hubo afectación, ¿cuál sería la respuesta de la guerrilla?
“No es un tema individual, es decir, desde el punto de vista de Victoria, hay mecanismos, por ejemplo la Comisión de la Verdad. Lo que hay que decirles a todas las víctimas y afectados es que recojamos esos archivos que tengan sus versiones, su historia, y vayamos allá a esos espacios donde hay que contar, en la comisión de la verdad donde tiene que empezar el relato de lo ocurrido y conocer lo que sucedió porque de lo contrario no llegaremos a la reconciliación que se requiere en este país”.
¿Victoria Sandino dormiría tranquila con lo logrado en los acuerdos?
“Sí, definitivamente sí. Estoy tranquila con lo acordado, pero intranquila con lo que viene de aquí en adelante, con lo que hay que continuar luchando y peleando. Eso sí genera mucha intranquilidad pero eso no nos detiene para continuar”.
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