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Dividir la sociedad entre amigos o enemigos de la paz, o de la seguridad, o de los impuestos, o usar cualquier otro tipo de categorización es, según el exrepresentante a la Cámara Federico Hoyos, uno de los principales males de la política, que se reproduce en la sociedad, orientada por los políticos.
Esta es una de las reflexiones que plantea Hoyos, elegido cuando tenía 28 años, en su libro Sin miedo al cambio, que se puede descargar de manera gratuita en la web. Tiene 15 capítulos y 206 páginas. Describe, entre otras cosas, cómo se hace una ley y opina sobre el futuro de la democracia.
“La política no es de categorías. Hay una mezcla en el ciudadano moderno, que es liberal en asuntos civiles y libre comercio, pero conservador en seguridad y en temas fiscales. El ciudadano empieza a adoptar ese discurso del líder y lo lleva a la cotidianidad. Un gran reto del nuevo Gobierno es evitar las categorías como amigos y enemigos de la paz”.
Agregó que más que la política como un concepto amplio y etéreo, reflexionó en su e-book (libro virtual) sobre la dinámica del Congreso y lo que no funciona en el órgano del poder público donde se crean las leyes y en donde, en teoría, se representa la voluntad popular.
Hoyos, excolumnista de este diario, no aspiró más a la Cámara; hizo parte del equipo de empalme del presidente entrante, en el Ministerio de las TIC. Fue autor de tres proyectos de ley: el que busca establecer un reporte anual sobre el estado de los TLC ratificados por Colombia, el que incentiva el uso de los vehículos eléctricos y otro que promueve la innovación.
Hoyos afirmó que, diferente a lo que muchos piensan, durante los cuatro años que trabajó con el exmandatario, pudo constatar que es muy respetuoso de la opinión diferente y democrático al escuchar todas las posturas. Agregó que constantemente recomienda libros y es genio de emociones, pero no vacías.
“El presidente Uribe es un líder sin carreta, al que no le gusta hablar carreta, que no le gusta que le hablen carreta sino con estudio y profundidad en los temas, independiente del escenario. Y no es que se le quite el sentimiento a la política, sino que es un respeto hacia el ciudadano de no llevar palabras vacías, sino las propuestas”.
Contrario a la posición de muchos de los miembros de su partido, explicó que Juan Manuel Santos tuvo logros, pero que fue un gobierno de cifras, que no logró comunicar mensajes a la ciudadanía.
Por último, afirmó que aún hay una sobrevaloración de la clase política, pero que su poder está en duda. “La victoria de Duque y el paso a segunda vuelta de Petro es la prueba de que hay una nueva manera de hacer política, de comunicar el mensaje y un debilitamiento de la clase política tradicional. No sé si por educación, mayor acceso a la información o hiperconectividad. El político tradicional ya no define la sociedad”.
Politólogo de la Universidad Nacional, Periodista de la Universidad de Antioquia y maestrando en Gobierno de la Universidad de Medellín. Tratar de entender e interpretar el poder, un reto.