El 17 de octubre de 2015, en el marco del proceso de paz entre el Gobierno nacional y las Farc, un nuevo acuerdo dio esperanza a las miles de víctimas: encontrar a sus seres queridos de quien perdieron el rastro por acciones de los grupos armados.
En aquella ocasión, el alto comisionado para la paz, Sergio Jaramillo, aseveró que la información entregada por los guerrilleros sería el insumo principal para buscar los desaparecidos. “Se van a utilizar recursos humanos y materiales y se saldrá a buscar información a campo, priorizando la búsqueda”, dijo Jaramillo.
Pero la iniciativa dejó tareas pendientes que hoy, siete meses después, fueron materializadas con la entrega de tres cartillas conocidas en primicia por EL COLOMBIANO, las cuales contienen los lineamientos para la entrega de los cuerpos de los desaparecidos que, según las autoridades colombianas, suman más de 100.000. De estos, 45.000 serían de desaparición forzada.
En la entrega de los documentos, Álvaro Polo, coordinador del Grupo de Exhumaciones de la Fiscalía Nacional Especializada de Justicia Transicional, explicó que las publicaciones son el resultado de la experiencia interinstitucional, y “son el punto de referencia para los funcionarios que intervienen durante las 4 fases para la entrega de cuerpos: revisión y documentación, atención interinstitucional, diligencia de entrega del cadáver y el archivo”.
Enfoques diferenciales
Los lineamientos para la entrega de los cuerpos de todos los desaparecidos a sus familiares, cuenta con elementos novedosos no tenidos antes en cuenta como son los enfoques diferenciales.
La exdirectora de la Unidad de Víctimas, Paula Gaviria, explicó cómo las tres directrices se centraron en atención especializada para la atención a los familiares de víctimas de desaparición. “Hay una de ellas con orientaciones para poblaciones étnicas, otra para niños, niñas y adolescentes, y otra con énfasis en personas con discapacidad y mujeres”.
El enfoque diferencial para los grupos étnicos, dice el documento, “reconoce las particularidades de cada quien y tiene en cuenta las comunidades a las cuales pertenecen las personas y su cosmovisión”.
El segundo enfoque, centrado en menores de edad , incluye en esta perspectiva “la noción de autonomía, la participación activa, la percepción de los niños como titulares de derechos y el respeto, reconoce la libertad para determinar y desarrollar su creatividad, sus capacidades de construcción y su punto de vista”.
Así mismo, y de acuerdo a la experiencia recogida por la Unidad de Víctimas, el 67 por ciento de las personas que acuden a la entrega de restos óseos o entregas simbólicas de desaparecidos son mujeres, razón valedera para incluir este grupo poblacional en las medidas de atención.
Los pasos a seguir
El director de Medicina Legal, Carlos Valdés, explicó a este diario que los cuerpos recuperados se tratarán de identificar por medios como antropología, odontología, patología y si es necesario por genética.
“Los cuerpos identificados se van a entregar de acuerdo al protocolo de entrega digna. Y los cuerpos que no se identifiquen van a permanecer por siempre en Medicina Legal”, aseveró Valdés.
El procedimiento de entrega digna de cadáveres contará con ocho fases. En caso de Desaparición Forzada y Homicidio tendrá cuatro etapas: revisión y documentación, atención interinstitucional, diligencia de entrega de cadáver, y archivo de la documentación del proceso de entrega.
En el caso de entrega simbólica a los familiares de víctimas desaparición forzada se tendrán también cuatro etapas: revisión y documentación, atención interinstitucional, diligencia judicial de entrega simbólica, y archivo de la documentación del proceso de entrega simbólica.