Por medio de un comunicado, la ONU anunció que el Secretario General del organismo, António Guterres, nombró a Tania Patriota como representante especial adjunta para Colombia y jefe adjunta de la misión de las Naciones Unidas de Colombia.
Patriota, quien acompañará al jefe de la Misión, Jean Arnault, es de Brasil y tiene 20 años de experiencia con el organismo. Ha trabajado para promover el desarrollo y apoyar la respuesta a las crisis. En Colombia trabajó durante cuatro años con el programa del Fondo de Población de las Naciones Unidas, Unfpa.
“Durante los últimos trece años, la señora Patriota ha trabajado con el Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa) en Brasil, Haití, Colombia y Mongolia, además de puestos en la sede de Nueva York”, informó la ONU.
La nueva Jefa Adjunta tiene un Master en Salud Pública de la Universidad de Columbia, Estados Unidos, título en Psicología Cognitiva y Experimental y Cálculo Número de la Universidad de Ginebra, en Suiza.
“Tiene una profunda experiencia en las áreas de salud pública internacional, población y desarrollo, y prevención y respuesta a la violencia de género”, agrega el comunicado oficial.
Justicia especial para la paz
Junto a este nombramiento ha rondado en los medios de comunicación una carta del Secretario General en la que acepta designar a una persona para ser parte del Comité de Escogencia de los magistrados que harán parte de la Justicia Especial para la Paz.
Guterres nombrará a alguien que no sea funcionario del organismo para que se cumplan los objetivos de autonomía, independencia e imparcialidad que se quiere lograr en los magistrados que harán parte del Tribunal de Paz. Sin embargo, solo hasta que se designe a la persona se hará el pronunciamiento oficial por parte de la ONU.
Además del Secretario, las organizaciones que escogerían a los magistrados serían la Sala Penal de Corte Suprema de Justicia, la Comisión Permanente del Sistema Universitario del Estado, la delegación en Colombia del Centro Internacional de Justicia Transicional y junto a ellas estaría el Papa Francisco, pero desde el Vaticano se negó la solicitud el año pasado por lo que lo reemplazaría la Corte Europea de Derechos Humanos.
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