En la noche de este jueves, el expresidente Álvaro Uribe le entregó al Centro Democrático, su partido, un primer borrador detallando su propuesta de acto legislativo para que en Colombia se adopte la amnistía general, la cual puso él mismo en el debate nacional y generó reacciones diversas de sectores políticos.
En el documento, Uribe precisa los delitos que estarían excluidos del proyecto que busca, según él, superar asimetrías judiciales derivadas del proceso de paz con las Farc, del cual es el más duro opositor.
En efecto, la lista de delitos que se exceptúan son los que tienen que ver con “lesa humanidad, crímenes de guerra, delitos de conocimiento de la Corte Penal Internacional y de corrupción en la contratación pública”, según se lee en el borrador que ya es objeto de debate entre la bancada del Centro Democrático.
Según la propuesta, que Uribe lanzó durante su diálogo con delegados de la Comisión de la Verdad, entre ellos el padre Francisco de Roux, la amnistía se permitirá por una sola vez a personas que hayan sido condenadas o procesadas; además, cobijaría a sancionados o a quienes se les vincule con procesos administrativos de pérdida o inhabilidades de derechos políticos.
Estas personas, según el texto, podrán ser elegidas para cargos de representación popular o nombradas en la administración pública, con observancia de los requisitos sobre determinada materia.
La propuesta del exmandatario ha recibido respaldo de miembros de su partido, como los de las congresistas Paloma Valencia y Paola Holguín. Sin embargo, a la iniciativa también le han salido detractores, entre ellos el fiscal general, Francisco Barbosa.
Para él, la idea de amnistía total o general está proscrita en el Derecho Internacional Humanitario, por lo que “no puede haber gente que quiera lavarse la cara con amnistías totales, eso no va a pasar mientras yo sea fiscal, no voy a permitir que eso avance”.
Otros que se han pronunciado son los exmiembros de la delegación del pasado gobierno para el acuerdo firmado con las Farc. Se trata de Humberto de la Calle y Sergio Jaramillo, quienes hace dos días rechazaron la propuesta de Uribe argumentando que esto afectaría las investigaciones y juzgamientos que se les siguen a los principales responsables de grandes violaciones a los derechos humanos.
Detalles del borrador
¿Qué pasaría si el beneficiado con la amnistía incurre en una posterior conducta delictiva? Para Uribe, a esa persona se le agravará la pena en la mitad. Por otro lado, en el caso de miembros de las Fuerzas Armadas, si el acto legislativo prospera y llega a promulgase, el militar condenado que haya cumplido cinco años de prisión para la fecha podrá solicitar la libertad condicional, “sin que esto implique autoincriminación”.
Los beneficiarios de la aministía, además, podrán ser avalados por partidos políticos o grupos significativos de ciudadanos para eventuales elecciones, a menos que dicha persona incurra en una sanción penal posterior. Si es así, el partido no podrá otorgarle el aval.
Este borrador, como se venía insistiendo en la semana, será sometido a debates internos en el Centro Democrático y con más sectores políticos, con el fin de que al ser radicado oficialmente en el Congreso tenga un respaldo amplio.
