Tras siete años de estar en el poder y a 12 meses de terminar su mandato, el presidente Juan Manuel Santos tiene una serie de desafíos claves, como, por ejemplo, concluir importantes proyectos viales, recuperar la salud, avanzar en educación, lograr la implementación del Acuerdo de paz y alcanzar la recuperación económica. En este sentido, un grupo de siete expertos analizó los frentes en los que deberá concentrarse este año.
En Antioquia, los principales retos, según el profesor de la Facultad de Ciencias Políticas de UPB, Miguel Silva Moyano, tienen que ver con la condición del departamento como escenario de confrontación y criminalidad.
“Será un año clave en el inicio del proceso de desmovilización, por lo que tendrá que hacer énfasis en el trabajo articulado con las autoridades del Valle de Aburrá. Se requiere apoyo ante la compleja situación de disputa permanente que ha sido impuesta por las bandas criminales en Medellín”.
Asociado a esto, explicó Silva, la situación de tensión en zonas mineras marcará enfrentamientos muy fuertes. “Es posible que la distancia entre el presidente y el departamento, en general, se acentúe porque el último año de gobierno estará atravesado por la agenda electoral y fuerzas políticas cuestionarán asuntos como la disputa por Belén de Bajirá y la falta de apoyo del Gobierno a obras como las líneas de ferrocarriles o el Tranvía de la 80”.
Marco Fidel Vargas, director del Centro de Investigación y Educación Popular, Cinep, aseguró que el principal reto es la educación rural, en la que no se cuenta con una política clara desde hace 30 años. “Hay que superar la inequidad y falta de oportunidad. Por ejemplo, solo el 17 % de los niños del campo, menores de 5 años, tienen atención educativa”. En ese sentido, el analista sostuvo que la escolaridad promedio en estas zonas es de 5,5 años, mientras que en la parte urbana, el indicador se encuentra en 9,2 años. “De 2,1 millones de estudiantes matriculados en educación superior para 2015, solo 27.540 de origen campesino, lo que deja más claro el panorama”. Eso plantea otro reto, apostarle a la equidad en la educación superior.
Para Mario Hernández, doctor en Salud Pública de la U. Nacional, la situación ineludible se basa en la relación de la implementación del Acuerdo y el sistema de salud. “El modelo de atención integral podría aplicarse, según el gobierno, pero no porque el Acuerdo está pensado en una lógica territorial y el sistema de salud no”. Agregó, además, que se debe ver la salud desde otros ámbitos, como el ambiental. “El asunto de la relación entre salud y desarrollo municipal será la principal tarea, porque hasta ahora, no hay nada”, concluyó.
En el frente económico, Camilo Durán, analista de la firma Credicorp Capital, comentó que Santos deberá ocuparse de asegurar un buen manejo fiscal no solo para el final de su mandato, sino para quien lo suceda. “Esto se traduce en que las finanzas estén estables, tras asimilar el efecto de los menores precios del petróleo y podamos migrar hacia una economía que no dependa tanto de esa materia prima”. También mencionó que será necesario implementar las propuestas que genere la Comisión de Gasto Público, creada por la reforma tributaria de 2016, que evaluará la efectividad de la inversión del Presupuesto General de la Nación. “De sus conclusiones dependerá qué se puede recortar, qué componer y cómo reformar el presupuesto. Sin la renta petrolera, es indispensable acomodarnos, desde el lado del gasto, para que no aumente la deuda pública”.
En el componente ambiental, Santos la tiene compleja porque, no solo tendrá que hacerle frente a la deforestación, que alcanzó las 178.597 hectáreas, como lo explicó el profesor de la U. Nacional y coordinador de la Comisión permanente de áreas protegidas de la Academia Colombiana de Ciencias Exactas Físicas y Naturales, Gonzalo Andrade, sino que además no se puede mostrar indiferente con el presupuesto ambiental. “Hay que lograr un fortalecimiento del sector. Al Sistema de Áreas protegidas y la unidad de Parques Nacionales Naturales; así como los institutos de investigación adscritos no se les puede reducir el presupuesto para el año 2018, no se puede”.
La locomotora de la infraestructura vial habrá que ponerla a andar si quiere que proyectos como la Ruta del Sol y las 4G tengan algún avance. Juan Martín Caicedo, presidente de la Cámara Colombiana de la Infraestructura, CCI, indicó que, en estos meses, hay que dar los pasos necesarios, para que después del episodio de Odebrecht, el sector financiero recobre la confianza para invertir en el desarrollo vial del país. Indicó que es urgente que se logre la liquidación del proyecto de la Ruta del Sol 2, con el fin de que el Invías logre intervenir la vía.
Por último, Santos tendrá que ponerse al frente de fenómeno de violencia que se ha generado con la salida de las Farc y que está afectando a los líderes sociales. Así lo manifestó Jairo Delgado, especialista en Ciencia Política y general (r) de la Policía, quien explicó que se debe proporcionar una capacidad para responder, prevenir e investigar los hechos que han llenado de desconfianza a los habitantes de las regiones afectadas por las acciones de grupos armados que pretenden imponer sus normas con intimidaciones. La apuesta, subrayó, está orientada a sostener un operativo como lo es Agamenón, que ha golpeado a estructuras como el Clan del Golfo.