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Mañana termina la legislatura que inició el 20 de julio de 2020 en el Congreso, y con ella, una apretada semana de debates en la Cámara y en el Senado que ha dejado varias polémicas, como la registrada por la reforma a la justicia y la posibilidad de que reduzcan los requisitos para ocupar cargos como el de Fiscal o Defensor.
Pero hay otros proyectos de ley que también fueron motivo de discusión, entre ellos el que aborda la reducción de la jornada laboral semanal a 42 horas, la denominada “ley de la comida chatarra” y etiquetado a productos ultraprocesados, y la licencia paternal compartida.
Para que sean ley, los proyectos aprobados irán a conciliación y a su posterior sanción presidencial. Por ahora, el visto bueno en la plenaria de la Cámara el pasado jueves, en cuanto a la reducción de la jornada laboral a la semana de 48 a 42 horas progresivamente, generó distintas reacciones.
Por el lado de su autor, el exsenador Álvaro Uribe Vélez, este expuso que la reducción es algo que le conviene al país y la calificó como un “gesto para la fraternidad”.
Pero sectores económicos no la consideran así. De hecho, la Asociación Colombiana de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Acopi), pidió que se archive, pues “el sector no está en las condiciones de asumir nuevas cargas”, que se crearían al tener que, por ejemplo, contratar más trabajadores.
Otro de los proyectos que pasó tras varios intentos fue el de la “ley de la comida chatarra”, la cual, a partir de su sanción, incluirá en empaquetados como los de papas fritas un etiquetado frontal, visible y de color negro que “permite que se tomen decisiones saludables sobre los índices de obesidad, y protege la salud del consumidor”, explicó Juan Luis Castro, senador que impulsó la iniciaativa. Por último, otro que espera ser sancionado es el de la licencia paternal compartida, que busca que tanto mamá y papá sean corresponsables con el recién nacido. Para esto, los hombres pasarán de tener ocho días de licencia a dos semanas; y podrá ajustarse hasta tres más.
Así están otros proyectos que reposan en el Congreso. Dos de los que más han suscitado reacciones son el de Especialidad Agraria y el de la reducción a las vacaciones de los congresistas.
El primero está relacionado con la implementación de los Acuerdos de Paz, y busca que el Estado envíe a jueces especializados a distintos territorios para que resuelvan conflictos por el uso y tenencia de la tierra.
Si bien es impulsado por el Gobierno, los congresistas de la oposición alertaron que lo que están haciendo con él desde el Ministerio de Justicia es retrasarlo.
El otro, de reducción de cuatro a tres meses en las vacaciones de los congresistas, cuyo impulsor es el representante Gabriel Santos, aunque estuvo en vilo, finalmente se incluyó en el orden del día y fue aprobado en primera vuelta por ser un proyecto de reforma constitucional.
Para darle el debido trámite a estos y el resto de proyectos, el Gobierno puede llamar a sesiones extraordinarias, aunque no hay nada oficial por ahora