El fin del ciclo 36 de las negociaciones entre el Gobierno y las Farc prolonga la espera por el acuerdo sobre derecho de las víctimas. Mientras el Ejecutivo insiste en que la guerrilla está en deuda con anuncios en la mesa, como dejar de reclutar menores, se anuncian avances para el desminado humanitario.
Ambas partes señalaron que ya está definida la “hoja de ruta” para implementar el proyecto piloto de desminado, anunciado el pasado 7 de marzo y que se ejecutará con el apoyo de la organización Ayuda Popular Noruega en zonas de Antioquia y Meta, en su primera fase.
“Definimos la hoja de ruta para la implementación del proyecto piloto de desminado (...) también establecimos el desarrollo técnico y logístico para la puesta en marcha de las actividades en cada fase del proyecto”, indicó el comunicado conjunto.
Aunque los sitios aún no son revelados, la Gobernación de Antioquia reclama la intervención urgente en Briceño, Ituango, Cáceres y Tarazá, mientras que en Meta solicitan priorizar Vista Hermosa, Uribe, Puerto Rico, Mesetas y La Macarena.
Las diferencias tras el ciclo 36 se dan por asuntos como el reclutamiento forzado de menores de edad.
El jefe negociador del gobierno, Humberto de la Calle, pidió a las Farc coherencia entre el discurso y la acción ante las denuncias de las autoridades de que no se detiene el reclutamiento ilegal de la guerrilla y las contradicciones de sus líderes, que reconsideraron no devolver a los niños y adolescentes que ya están en sus filas insurgentes.
“El mensaje que ha enviado a la sociedad es confuso, pues el Ejército y el Icbf han comprobado que esa práctica aún se mantiene. Es imperativo que las Farc detengan ya el reclutamiento de menores de 18 años y es urgente diseñar un plan con supervisión internacional para excluir a los menores ya incorporados en sus filas”, afirmó De la Calle.
Aunque el ataque de las Farc en Cauca, que le costó la vida a 10 militares, “lastimó la confianza” en el proceso de paz y obligó al Gobierno a reanudar los bombardeos contra la guerrilla, el ciclo que terminó volvió a abordar el tema.
La subcomisión técnica del fin del conflicto, integrada por militares activos y miembros de las Farc, se reunió durante varios días y se entrevistó con expertos internacionales para revisar el tema del cese bilateral y definitivo al fuego.