El servicio meteorológico estadounidense atinó: predijo que sobre las 8 de la noche de ayer caería una tormenta sobre la ciudad de Chicago y afectaría la semifinal que ganaba Chile 2-0 sobre Colombia.
Ya en el campo de juego, al que le cayó un torrencial aguacero fue al fútbol del equipo criollo que en 10 minutos vio cómo la Roja le encajó el 2-0 más rápido en la historia de una Copa América, según el estadígrafo @misterchip.
Charles Aránguiz (6’), tras un mal rechazo de Cuadrado, y José Fuenzalida (10’) aprovecharon los errores de la zaga cafetera y cobraron, acciones suficientes para acceder a su segunda final consecutiva en esta competición.
El clima también jugó su partido y aplazó el segundo tiempo más de dos horas, mientras los jueces decidían la continuación.
En el complemento, la expulsión de Carlos Sánchez no impidió que, con más ganas que fútbol, los cafeteros siguieran luchando por el empate, pero los esfuerzos no dieron frutos.
Incluso, hubo un penal no pitado sobre Daniel Torres, quien al final no se lamentó por la situación. “Se luchó, dimos ventajas en el primer tiempo, pero yo creo que el trabajo fue bueno y hay que seguir mejorando”.
Por ahora, el enfoque está en el encuentro que disputará el sábado, a las 7:00 p.m., ante Estados Unidos por el tercer lugar.