Por juan felipe zuleta valencia
Antes de cumplir 20 años, Carlos Cuesta se dio el lujo de jugar casi 70 partidos profesionales con Nacional y alzar cuatro títulos.
El año pasado, mientras se estuvo recuperando de una lesión de hombro que lo sacó cuatro meses de las canchas, el paisa criado en Condoto, Chocó, analizaba escoger entre la Administración y el Derecho para comenzar de una vez su carrera universitaria. Y es que al zaguero lo ha caracterizado la determinación y la ambición profesional.
De hecho, como el mismo jugador contó a este medio, Reinaldo Rueda le confesó, en repetidas ocasiones, que lo había integrado de lleno en el equipo profesional, a pesar de su juventud, porque veía que a diferencia de muchos jugadores, incluso más experimentados, jamás lo había visto en una zona de confort por el mero hecho de estar en un equipo que ofrece muchas comodidades.
Los planes que tenía Cuesta para realizar una carrera universitaria seguro los concretará en Bélgica, donde el fin de semana llegó para realizarse los exámenes médicos y firmar hoy su contrato con el Genk, equipo en el que milita el vallecaucano Jonh Lucumí.
La venta del pase de Carlos, que le permitirá a Nacional mantener un 20% de sus derechos deportivos, le ofrece al capitán de la Selección Sub-20 proyectarse en un club de extensa tradición formativa, guardando las proporciones, como lo hace el Ajax.
Para la afición seguro queda la sensación de no haber disfrutado lo suficiente a un jugador cuyo carácter, capacidad profesional y aplomo contrastan con su juventud.