viernes
7 y 9
7 y 9
Supermán y Nairo volvieron a perder tiempo con el líder Primoz Roglic
y Alejandro Valverde. Mañana habrá descanso.
Otra etapa de montaña en la que se esperaba mejor actuación de los ciclistas colombianos, se fue en blanco para sus intereses.
La fracción número 15 de la Vuelta a España disputada entre Tineo y el Santuario del Acebo, con un recorrido de 154,4 kilómetros, volvió a mostrar un sólido líder, Primoz Roglic, quien entró por delante de sus grandes rivales y no solo conservó, sino, que reforzó el jersey rojo.
Mientras Miguel Ángel López se dedicó a no perder de vista al tercero en la general, Tadej Pogacar, Nairo Quintana no pudo sostener el paso y perdió 1 minuto y 36 segundos con Roglic y su compañero Alejandro Valverde.
“No se puede hacer más. No vamos a ponernos a llorar por algo que no lo merece. Hoy (ayer) no estaba bien. Sentía mucho cansancio; es lo que hay cuando comienzas desde enero a tope hasta ahora”, dijo Quintana, después de la etapa.
El ciclista boyacense, ganador de la Vuelta en 2016, consideró complicado atacar de lejos, habida cuenta de que su compañero Marc Soler iba en la escapada.
“¿Atacar desde lejos? Llevábamos a Soler adelante y era un poco complicado; no se sabe. Igual si otro equipo hubiera estado interesado... Pero bueno: mañana (hoy) es otro día y cualquier cosa puede pasar. Desde salida se puede hacer la carrera dura, siempre y cuando haya cuerpo”, agregó.
Ahora le tocará al colombiano trabajar para Valverde, segundo en la general y el rival más fuerte que tiene el esloveno para aspirar al título. Ayer, el español fue el único que le sostuvo el paso.
“Tenía buenas piernas y por eso he atacado de lejos”, manifestó Valverde, quien reconoció que hubo “entendimiento” con el líder, el único que salió en su arrancada.
En ese sentido, dio “gracias” a Roglic por haber tirado durante una parte de la subida y también a (Marc) Soler por haberlo esperado en el ascenso definitivo.
Se congratuló de haber conseguido 40 segundos más de ventaja sobre Tadej Pogacar y Miguel Ángel López, que le siguen, tercero y cuarto, en esa clasificación.
“No haber conseguido nada estaría mal, pero 40 segundos está claro que son buenos”, dijo el murciano.
Para el vigente campeón del mundo, él y su equipo (Movistar) han hecho lo que se tiene que hacer, batallar. “Soler fue por delante y cuando no podía ganar, me esperó”, subrayó.
También se felicitó por verse peleando en cabeza en la Vuelta a sus 39 años de edad y sostener un duelo con Roglic: “si es un mano a mano quiere decir que es para ser primero o segundo en la general”.
Respecto a la etapa dijo: “Todos hemos ido a tope y sufrido, adelante o atrás”. Y sobre la fracción de hoy, en principio la reina de esta edición, con final en el Alto de La Cubilla, el llamado Galibier asturiano, prevé que será “muy similar, dura”.
El ganador de ayer fue el estadounidense Sepp Kuss (Jumbo Visma). El primer gran asalto en Asturias dio a conocer las habilidades escaladoras del americano, un chico de 24 años nacido en Durango (Colorado) que subió como un cohete y en solitario las temibles rampas de El Acebo.
Hizo inútiles por 38 segundos los intentos del portugués Ruben Guerreiro (Katusha) y del británico Tao Geoghegan para alcanzarlo.