Tal como lo hizo el año pasado en el Giro, este martes Nairo Quintana levantó nuevamente los brazos para festejar un título en territorio italiano, el de la edición cincuentenario de la Tirreno-Adriático, conocida también como la carrera de los Dos Mares.
El líder del Movistar Team vaticinó desde el lunes que la contrarreloj no debería representar un problema para convertirse en el nuevo campeón y así fue. Culminó su participación arribando a la meta en la posición 51, completando los 10 kilómetros del trazado en 12 minutos y 18 segundos.
(En fotos: Nairo, el rey de los Dos Mares)
Con un recorrido total de 25 horas 11 minutos 16 segundos superó al holandés Bauke Mollema (Trek) por 18 segundos y al antioqueño Rigoberto Urán por 31’’, para subir al primer escalón del podio y alzar por primera vez el trofeo en forma de tridente.
Por su parte, Urán (Etixx Quick-Step) fue 25 en la última etapa deteniendo los cronómetros en 12:01 minutos para lograr el tercer puesto en la clasificación general.
El ganador de la etapa fue el suizo Fabian Canellara (Trek), quien marcó un tiempo de 11:23, cuatro segundos por delante de Adriano Malori (Movistar) y nueve sobre Vasil Kirienka.
Regreso triunfal
No pudo ser mejor el regreso a la competencia para Nairo, quien vio frustradas sus ilusiones de título en el Campeonato Nacional de Ruta en Antioquia y previamente en la Vuelta a España, por un par de caídas.
De esta manera Quintana avisó a sus oponentes que está listo para dar la pelea en el Tour de Francia, donde volverá a verse las caras con Nibali, defensor del título, y Contador, ganador de la Vuelta a España.
Carlos Julián, todo un escarabajo
El caldense Carlos Julián Quintero, de 29 años, también enalteció el nombre de Colombia al coronarse de manera anticipada como el campeón de la montaña.
Quintero, corredor del Team Colombia, protagonizó varias escapadas durante la carrera y por esta razón este martes se viste de verde.
