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Con la renuncia de Jorge Luis Pinto como técnico de Millonarios, luego de quedar eliminado en el torneo colombiano del segundo semestre, ya son 13 entrenadores que han dejado sus cargos (ver informe).
El santandereano puso a disposición de los directivos su puesto, expresando “admiración y aprecio” por la institución en la que ha estado en tres épocas. En esta última dirigió 54 juegos, ganó 27, perdió 13 y empató 14 para un rendimiento del 58.6 por ciento.
La cifra de estrategas que han dimitido o los han destituido en la Liga Águila-2 contrasta con un dato significativo: solo 2 equipos (Cúcuta y Santa Fe) que avanzaron a los cuadrangulares han cambiado de timonel, los 6 restantes le han apostado al proceso y se mantienen en competencia (Nacional, América, Cali, Junior, Tolima y Petrolera).
En todo el año, únicamente cuatro elencos conservan el técnico que comenzó la temporada: Cali (Lucas Pusineri), Tolima (Alberto Gamero), Once Caldas (Hubert Bodhert) y Petrolera (César Torres).
Alexis García dejó al Pasto por decisión personal. Mendoza y Sarmiento dijeron adiós en momentos en que atravesaban campañas difíciles y había mucha presión.
El panorama ratifica la inestabilidad laboral a la que están sometidos estos profesionales, sin que logren juntarse como en el pasado intentó Francisco Maturana al crear la Asociación Colombiana de Entrenadores, en Medellín, que además de apoyo jurídico les brindaba capacitación a sus asociados. La entidad aún existe, pero solo de nombre.
“Nosotros tenemos la culpa por la forma como nos dejamos contratar; somos inmediatistas, el resultado está por encima de cualquier cosa. El único objetivo es estar entre los 8, no hay proyectos serios y coherentes, las garantías son mínimas”, expresó Carlos Navarrete, extécnico de Nacional, Envigado, Jaguares, Once Caldas y Águilas.