El entrenador, quien tenía 69 años, habría fallecido por una infección urinaria, de acuerdo con la información extraoficial que se maneja en Argentina. Eso pudo haber empeorado la salud del técnico, quien venía sufriendo varios quebrantos desde agosto, después de dirigir el Mundial de Clubes que se realizó en Estados Unidos y en el que Boca Juniors no tuvo una buena presentación.
Miguel Ángel Russo, que fue campeón con Millonarios en el segundo semestre de 2017, había padecido un cáncer de próstata que le fue diagnosticado cuando estaba al frente del elenco capitalino. En ese momento, recibió tratamiento por parte de los médicos de la Clínica el Country de la capital del país, quienes trabajaron de manera articulada con sus médicos de cabecera en Buenos Aires.
En la capital de su país le hicieron una cirugía. Entre tanto, recibió el tratamiento médico en Bogotá. Hay una historia que cuenta que en la final del Clausura del 2017, contra Santa Fe, que se disputó en la noche del 17 de diciembre en el estadio El Campín de Bogotá, Miguel Ángel dirigió después de haberse sometido a un procedo de quimioterapia.
Cuando se recuperó de su problema de salud, en una rueda de prensa, Russo lanzó una frase que se inmortalizó: “el amor todo lo cura”. Salió de Millonarios en 2018. Empezó a ser un trotamundos. Estuvo en Alianza Lima de Perú, Cerro Porteño de Paraguay, Al-Nassr de Arabia Saudita, para pasar, desde 2023, sus últimos años en Argentina. Ahí dirigió a Rosario Central (2023-2024), San Lorenzo (2024-2025) y Boca Juniors.
En sus últimos meses de vida, Miguel Ángel Russo cumplió el sueño de todo futbolero: dirigió al equipo de sus amores, en el que tuvo tres pasos exitosos. Antes del que empezó en junio del 2025, estuvo sentado en el banquillo de La Bombonera entre 2020 y 2021, así como en 2007, cuando llevó al club xeneize a ganar la Copa Libertadores. Por ese entonces, le tomaron al entrenador una foto que le ha dado la vuelta al mundo: aparece, de frente, dándose la mano con Diego Maradona. Ahora, seguro, se reencontrarán en el cielo del fútbol.