Un dejo de tristeza envolvió, de nuevo, al antioqueño John Lenon Gutiérrez tras la decisión en contra que se anotó en su debut como seleccionado de Colombia, esta vez combatiendo en la Serie Mundial de Boxeo.
Mientras, y aunque su victoria no tiene reparos, Céiber Ávila no ocultó su incomodidad por el desarrollo del pleito en el que se notó algo cansado debido al esfuerzo previo que tuvo que hacer para dar el límite de la división (52 kg).
Tanto Lenon como Céiber fueron las cartas antioqueñas en la velada del viernes en Cartagena que determinó un nuevo éxito del equipo Heroicos, esta vez sobre Venezuela, 4-1 en la segunda fecha de este singular torneo semiprofesional que, entre otras cosas, registra pleitos a cinco rounds.
El rostro de Lenon denotaba tristeza, igual a la del pasado Nacional de mayores en noviembre, en Barranquilla, cuando perdió la final en forma controversial y dividida con Albeiro Paredes (Atlántico). Esta vez todo fue más claro, el patriota mostró superioridad y mejor alcance de brazos. “Quería ganar e hice todo el intento. Representé bien a mi país y espero tener revancha cuando el profesor me vuelva a poner a pelear”, dijo.
Por su parte, el combate que Ávila se apuntó tuvo pasajes complicados para él, aunque supo controlarlos. “No fue la mejor pelea de Céiber, tuvo que bajar mucho peso en los últimos días y eso le afectó”, indicó el entrenador cubano Rafael Iznaga.
“Se ganó y eso fue lo importante. Me tocó un rival complicado; no fue nada fácil acomodarme a su estilo. También me afectó el desgaste para dar el peso y los cinco rounds a los que no estamos acostumbrados. Gracias a Dios todo salió bien”, expresó Ávila.