La cuenta regresiva da pocos días: 23. Pronto un nuevo Festival Iberoamericano de Teatro se pondrá en la escena de Bogotá. Anamarta de Pizarro , la directora, ya tiene hasta el azul del pelo listo.
Está presente la idea de transformar. ¿Cuáles son esos cambios de este año?
"Muchos cambios. Uno por ejemplo a nivel de teatro de calle, en el que nosotros invitamos a las familias a que nos acompañen a los parques. Pueden ver un espectáculo cada 20 minutos o cada hora. A nivel de las salas creo que hay una propuesta contemporánea, en la que lo fundamental son los artistas".
¿Tiene que ver con lo de actores versátiles?
"Sí, por supuesto. Creo que tiene que ver con una transformación del circo. El circo se convierte en una puesta en escena un poco teatral. Y lo mismo está pasando en el teatro".
¿Rumania es el país invitado. Por qué ese interés por el centro de Europa?
"Creo que porque el centro de Europa nos ha deleitado con grandes montajes. Creo que en el momento en que se acaba el comunismo, esos grandes directores y actores, sufren una transformación, es como la fiesta de la alegría, que regresa a estos países y que nos muestra una dimensión de los clásicos, pero con unos montajes más versátiles, que atrapan mucho más".
Caleidoscopio es la obra creada por el festival...
"Una obra en la que estamos trabajando todavía. Nosotros desde el festival coproducimos cinco espectáculos con grupos de teatros colombianos, pero con Caleidoscopio, después de haber demostrado en la clausura del mundial sub20 que éramos capaces de hacer un espectáculo de grandes dimensiones, es un show muy bello. Tiene mapping , luces, vuelos, pólvora programada. Una producción muy grande, creada especialmente para las plazas de toros".
Hace dos años era la primera vez sin Fanny, ¿cómo ha sido ahora?
"Estoy segura de que Fanny está detrás de nosotros y a veces chancletiando. De todas maneras es muy duro. Cuando hay una persona con una presencia tan fuerte como la de ella, ese vacío no es fácil, pero no nos interesa llenarlo. Y es mucho más complicado cuando hay una carga que no está llegando, o cuando hay un patrocinador que dice que no, uno dice, ¿dónde está la señora para que nos ayude?"
Dicen que a las piernas de Fanny no le negaban nada, ¿y a Anamarta?
"Tampoco es que no me nieguen nada, me toca trabajar, y con ella tampoco era verdad. Ella me decía, ríndelos por cansancio, mijita. Es una máxima que aplico a diario".
¿Su estilo?
"Es un estilo que de todas maneras los patrocinadores conocían, porque yo siempre había estado trabajando con ella. Soy un poco más serena, más pausada. Lo que pasa es que Fanny tenía una cualidad muy grande, es que tenía carisma de actriz y de diva. Yo no, pero ahí voy. Estoy haciendo mi tarea juiciosa".
Y con el pelo azul...
"Además con el pelo azul, que es una comodidad. No me importa que se vean las canas. Ahí con el azul se mezcla y no se nota (risas)".
Al principio uno escuchaba que había divisiones en la organización. ¿Ya no?
"Hoy en día tenemos el mismo presidente en las dos juntas, que están trabajando conjuntamente y dos instituciones que están funcionando desde la misma casa. Ya somos 250 personas".
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6