Los espacios sociales son, por definición, un escenario para lucirse, una especie de alfombra roja para exhibir nuestro gusto, estilo y elecciones en materia de moda.
Ya sea que se trate de la invitación a una fiesta, un condumio, un desfile de modas, el coctel de apertura de una exposición de arte en la galería, un almuerzo con amigos o una corrida de toros. ¡Verse y sentirse bien es indispensable!
Y eso se nota al mirar a los asistentes a las dos primeras de abono en La Macarena.
Cada vez mejora el panorama de estilismo: yines bien elegidos, es decir, de tendencia (con sutiles efectos de lavado) y botas ajustadas. El color es uno de los ganadores: a ellas las vi de blanco o de tonos vivos (rojo, azul, amarillo), con zapatos a juego, y ellos lucían la indispensable camisa blanca o en tonos claros.
Quisiera no ver tantas botas metalizadas, térmicas tipo invierno, pues están de más en días de sol y en la plaza de toros. Y eliminar, poco a poco, la idea de que la fiesta brava está asociada, irremediablemente, a rojo y negro.
Ah, y no hay que uniformarse de pies a cabeza. La creatividad invita a dar vuelta al ruedo.
Pico y Placa Medellín
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