También desde la legislación que regula los comportamientos de los ciudadanos en la vía, especialmente cuando de conducir vehículos se trata, el país entró en la "onda verde".
Esto para concientizar mediante la pedagogía, pero también el garrote de la sanción, sobre la necesidad de tener mayores controles frente a los impactos que sobre el ecosistema se pueden generar con actividades como la del transporte.
Los problemas causados al medio ambiente y que se atribuyen al vehículo o su mal manejo también son duramente señaladas en el Código Nacional de Tránsito.
De acuerdo con esta normatividad, en su artículo 122 la sanción económica por este tipo de infracciones asciende a 30 salarios mínimos legales diarios vigentes.
Con esta norma se busca hacer operativo lo dispuesto en la Ley 1259 del 2008 y que creó el denominado comparendo ambiental, facultando a las autoridades de tránsito a imponer las sanciones y ejercer el control sobre todas las infracciones que ocasionadas por un conductor o un vehículo afecten el ecosistema.
Y aquí, explica Germán Giraldo, subsecretario legal de la Secretaría de Transportes y Tránsito de Medellín, la reincidencia también tiene una sanción fuerte. Es así que cuando se detecta el incumplimiento de las normas ambientales, por ejemplo arrojar basura desde el vehículo, por segunda vez, la licencia del conductor puede ser suspendida hasta por seis meses, y si el conductor es el mismo propietario del vehículo tiene una sanción por 30 salarios mínimos diarios.
Así que si su carro, o usted desde su vehículo están atentando contra el medio ambiente pueden llevarse un dolor de cabeza, que podría evitarse justo a tiempo. Antes de tirar el papel a la calle, o de rodar con un carro en condiciones deficientes piense lo que le puede costar.
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