Las protestas contra la corrupción, el aumento en las tarifas de los pasajes de bus o los problemas en el sistema de salud llegaron este miércoles hasta los estadios, donde los hinchas de la selección brasilera sacaron pancartas para protestar contra las decisiones del Gobierno.
En ese sentido, los alcaldes de Sao Paulo y Río de Janeiro, las dos mayores ciudades de Brasil, anunciaron este miércoles una reducción de los pasajes de bus tras las protestas que han sacudido en los últimos días al país por la subida de las tarifas de transporte público.
Tras siete días de protestas en la mayor ciudad del país, el alcalde de Sao Paulo, Fernando Haddad, anunció su decisión de revocar el aumento del valor del pasaje de bus desde 3,00 reales (unos 2.500 pesos) hasta 3,20 reales (unos 2.700 pesos), que había entrado en vigor a principios de este mes.
El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, igualmente anunció una reducción de 20 centavos de real, con lo que las tarifas regresarán a los 2,75 reales (2.300 pesos) en que estaban antes del aumento.
El Gobierno regional de Río de Janeiro informó en un comunicado que igualmente revocó el alza de las tarifas de metro, trenes urbanos y barcas que cruzan la bahía de Guanabara.
