El esperado regreso del Deportivo Cali al Pascual Guerrero no fue como lo esperaban los dolientes del cuadro azucarero.
Resignó dos puntos al igualar 1-1 con el Once Caldas; tuvo que jugar con estadio vacío por la sanción que arrastraba desde el torneo pasado, y su funcionamiento, especialmente el defensivo, dejó muchos reparos en un torneo que apenas está arrancando.
La igualdad, sin embargo, le permite al elenco vallecaucano llegar a cuatro puntos, una cosecha bastante buena si se compara con el pésimo inicio de torneo que tuvo el semestre anterior, cuando en sus cuatro primeras salidas se llevó igual número de derrotas.
El miércoles el Cali se encontró con un rival que le jugó mano a mano y que apenas calentando motores, minuto seis, se fue arriba con un penal cobrado por José Moreno, previa falta de Gonzalo Martínez sobre el escurridizo John Pajoy.
Los verdes no quisieron que las cosas se le complicaran y por eso a los 12 encontraron el empate por medio de César Amaya, quien culminó una gran jugada que se inventaron por derecha Gustavo Cuéllar y Yerson Candelo.
Por opciones, por fútbol y por control del balón, el empate fue justo. El local hizo méritos para quedarse con los tres puntos. El visitante también acarició la victoria. Y en ese ir y venir de ambos equipos, los arqueros Leandro Castellanos y Juan Carlos Henao tuvieron buenas intervenciones hasta el punto de evitar más goles.
El Cali tuvo claridad ofensiva cuando el balón lo tuvieron Gabriel Fernández, Yerson Candelo y Hernán Darío Burbano. Pero defensivamente lució inseguro. Gonzalo Martínez y Héctor Quiñónez fueron repetidamente superados por Jéfferson Cuero y John Pajoy, dos habilidosos atacantes que encontraron el espacio ideal para imponer su velocidad.
Arrancando el partido llegó el gol visitante justamente en una aparatosa acción de Gonzalo Martínez sobre Pajoy. Penal, cobro de Pepe Moreno, baló al palo derecho de Castellanos, arquero al otro ángulo y 1-0 para el Once.
A los 12 se dio el empate. Cuéllar se la filtró a Candelo, éste centró a media altura y en el área chica, libre de marca, César Amaya metió la cabeza para el 1-1.
Después llegaron opciones de parte y parte que no se concretaron, finalizando el partido con un 1-1 que no es bueno para el Cali porque era el local, y que resultó un buen negocio para el Once porque se llevó un punto en condición de visitante.
Pico y Placa Medellín
viernes
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