El ministro del Interior, Aurelio Iragorri, sostuvo este domingo que el gobierno evitó que la liberación de un nuevo secuestrado por parte de las Farc se convirtiera en show de la guerrilla en los medios.
“Es importante destacar el hecho de que el señor presidente Juan Manuel Santos evitó que para esta liberación se presentara un show mediático que se quería armar a través de intermediarios y negociadores que pretendían conformar una comisión para que las Farc pudieran cumplir su palabra”, explicó el jefe de la cartera Política a Caracol Radio.
Insistió en que “lo importante era que cumplieran su palabra de no volver a secuestrar y por el otro lado que se pudiera hacer la liberación como se hizo de manera discreta directamente a la comisión de la Cruz Roja Internacional”.
LIBERACIÓN
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) entregó a las 11:30 de la mañana, en Bogotá a la Embajada de los Estados Unidos, al exmilitar estadounidense Kevin Scott Sutay, quien fue liberado por la guerrilla de las Farc tres horas antes en San José del Guaviare, tras cuatro meses de secuestro.
Scott fue liberado en una zona rural del municipio de Tomachipán, departamento de Guaviare, oriente de Colombia y entregado a una comisión humanitaria conformada por representantes de los gobiernos de Colombia, Cuba y Noruega y delegados del CICR.
Una médica del CICR examinó al liberado y confirmó que estaba en buen estado físico para viajar.
"Nos complace haber facilitado su liberación y que pueda reunirse de nuevo con su familia, reiteramos la disposición del CICR para seguir actuando a solicitud de las partes, como intermediario neutral en este tipo de operaciones", agregó Jordi Raich, jefe de la delegación del CICR en Colombia.
Raich recordó que está es la liberación 19 que se realiza en Colombia con la intervención del CICR en lo que va de 2013.
El Gobierno había insistido en la obligación del grupo insurgente de liberar al ciudadano extranjero y consideraba su retención como una "violación flagrante" de los compromisos anunciados por las Farc, tras iniciar los diálogos de paz en Cuba, en noviembre de 2012.
El grupo guerrillero, que acusó al estadounidense de ser un "mercenario" al servicio del gobierno, se quejó hace dos meses en un comunicado divulgado en su página de internet que el Ejército había incrementado los operativos el departamento del Guaviare, donde fue secuestrado Scott, el pasado 20 de junio.
Por su parte, el presidente Juan Manuel Santos exigió que las Farc liberará al estadounidense sin "show mediático" y tras rechazar la participación de la exsenadora Piedad Córdoba advirtió que solo permitirá a la misión del Comité Internacional de la Cruz Roja (Cicr) participar en la liberación del exmilitar.
SECUESTRADO DESDE JUNIO
Kevin Scott Sutay es un exmarine de la Armada de Estados Unidos nacido en New York. Perteneció a las Fuerzas Armadas de ese país entre 2009 y comienzos de 2013, tiempo en el que habría pertenecido a las tropas que combatieron a los talibanes en Afganistán. Al principio de este año se retiró de la milicia, según información del Gobierno de Estados Unidos.
A mediados de este año ingresó a Colombia y según informaron las Farc; el pasado 20 de julio, fue retenido por guerrilleros en el municipio del Retorno, en Guaviare.
En un primer momento, la guerrilla lo acusó de ser un militar activo y mercenario que hacía parte de los militares estadounidenses que cooperan en Colombia. Así lo indicaron en un comunicado que confirmaba su retención: "La captura del soldado Kevin pone de manifiesto la activa participación sobre el terreno, de militares y mercenarios norteamericanos en operaciones de contra insurgencia en las que aparecen bajo el eufemismo de contratistas, forma privatizada de las fuerzas de intervención imperial".
Pero en octubre pasado, las Farc cambiaron su versión y consideraron a Scott como "un folclórico gringo, mascador de chicles y fumador de marihuana, que con un morral a la espalda, bluyines y unos cuantos dólares en el bolsillo, se lanza a conocer y recorrer el mundo, con una concepción muy particular sobre la vida". También lo llamaron "bueno, ingenuo, noble y despistado".
En septiembre, el grupo guerrillero anunció su liberación, que condicionó primer a la participación de la exsenadora Piedad Córdoba, pero el Gobierno rechazó esa posibilidad. Luego, la guerrilla pidió la mediación del reverendo estadounidense Jesse Jackson, quien aceptó participar, pero de nuevo el Gobierno reiteró que solo autorizaba al Comité Internacional de la Cruz Roja.
