En una playa del río Bubuey, en inmediaciones del municipio de Timbiquí, Cauca, personal de la Armada y agentes de la Sijín, hallaron un cristalizadero de coca y clorhidrato donde se producían entre tres y cuatro toneladas mensuales, que eran llevadas a al alta mar para ser enviadas a México y Las Bahamas.
En entable coquero funcionaba entre la selva tupida, y fueron incautadas tonelada y media del estupefaciente, químicos en abundancia, una lancha, dos plantas eléctricas, seis hornos microondas, siete grameras, un minipuerto de donde salían los embarques, equipos de comunicación, equipamentos para unas treinta personas, drogas y alimentos consistentes en granos y enlatados.
También había gran cantidad de hojas de coca listas para el secado.
El complejo fue destruido con la presencia de funcionarios fiscales.