x

Pico y Placa Medellín

viernes

0 y 6 

0 y 6

Pico y Placa Medellín

jueves

1 y 7 

1 y 7

Pico y Placa Medellín

miercoles

5 y 9 

5 y 9

Pico y Placa Medellín

martes

2 y 8  

2 y 8

Pico y Placa Medellín

domingo

no

no

Pico y Placa Medellín

sabado

no

no

Pico y Placa Medellín

lunes

3 y 4  

3 y 4

LA SANGRE DE JESÚS ANÍBAL ES SEMILLA DE FE

  • LA SANGRE DE JESÚS ANÍBAL ES SEMILLA DE FE
07 de octubre de 2013
bookmark

La pequeña ciudad de Tarragona, al sur de España, será escenario el próximo domingo de la beatificación de 522 mártires que murieron por la persecución que sufrió este país en 1936.

Dentro de ellos está un joven colombiano, nacido en el municipio de Tarso: Jesús Aníbal Gómez, quien a los 22 años fue asesinado, junto con 14 compañeros más en la estación de tren de Fernán Caballero, provincia de Ciudad Real, en España, por negarse a renegar de su fe.

Hace tres años el hoy Papa emérito Benedicto XVI aprobó el martirio de estos jóvenes, que aspiraban ser sacerdotes de la comunidad de los claretianos. La violencia política que desató en muchos combatientes el odio a los religiosos, truncó este sueño y acabó con las vidas de quienes se disponían a servir por medio de la vocación sacerdotal.

Jesús Aníbal tendría hoy 99 años. Era el menor de 14 hijos. A los 11 años entró al seminario y en 1935 le dijeron que debería viajar a España para prepararse para su ordenación sacerdotal.

Quienes le conocieron dicen que lo que más lo caracterizaba era su espíritu alegre, su inocencia, su sensibilidad espiritual y el amor por su tierra natal. 

Vivía en Zafra, Extremadura. A finales de 1936 les ordenaron a él y a sus compañeros trasladarse a Ciudad Real para huir de la violencia que golpeaba esa zona. Allí tuvieron que permanecer encerrados por las continuas amenazas que vivían quienes profesaran la fe católica.

El superior de su comunidad logró que a los religiosos les otorgaran unos salvoconductos para ir a Madrid y así emprendieron el viaje a la capital. Pero los milicianos llegaron a la estación de Fernán Caballero para matar a estos jóvenes. Asesinaron también a Jesús Aníbal, único extranjero de este grupo.

Morir mártir significa tener una fe tan fuerte que ni siquiera las amenazas de muerte pueden hacerte renegar de ella. No todos los religiosos que mueren asesinados son mártires porque no todos mueren por causa de su fe.

La Congregación para la Causa de los Santos estudia con sumo cuidado si el motivo de estas muertes violentas es la defensa de la fe. El caso de Jesús Aníbal resultó positivo.

Al martirio no se llega de la noche a la mañana. Una persona que cultiva su fe y es capaz de traducirla en buenas obras tiene la valentía de defender sus convicciones incluso con su vida y ese es el ejemplo de Jesús Aníbal y de los demás 521 mártires que este domingo llegarán a los altares.

“El mayor premio que puedo pedir a Jesús y María es que me conserven en su servicio y me den la muerte antes de abandonarlos”, escribió una vez Jesús Aníbal y ese fue el premio que finalmente les dio. El futuro beato ha testimoniado con su sangre la convicción de su fe. Hoy la Iglesia reconoce esta inmolación y por ello lo eleva a los altares. Hoy muchos colombianos se lo agradecemos.

Te puede interesar

¿Buscando trabajo?
Crea y registra tu hoja de vida.

Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD