En defensa de la vida y la libertad saludamos la liberación del periodista francés Roméo Langlois , pese al show de las Farc y la utilización de su secuestro como propaganda política.
Ningún trabajo periodístico justifica la pérdida de una vida humana, como tampoco puede justificarse que se ataque la libertad de información.
De ahí que celebramos su liberación sano y salvo, aunque como era previsible, el acto fuera aprovechado por los guerrilleros para echar sus proclamas y mostrarse partidarios de la paz, de labios para afuera y de cara a la comunidad internacional, cuando con sus hechos contradicen sus declaraciones.
El mismo Langlois pretendió restarle importancia a su secuestro, olvidando quizás que durante el combate en que fue hecho cautivo perdió la vida un sargento del Ejército.
Al recobrar la libertad habló de lo que otros quieren ignorar: "que el conflicto empeora".
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