Como los títeres no tienen nada que perder, algunos de los que actúan en el octavo Titirifestival, soltaron la lengua sin tapujos.
Reunidos en el escenario de Manicomio de Muñecos, el grupo organizador del Festival, dijeron que ellos, los muñecos, encuentran más ventajoso ser lo que son, en lugar de ser humanos. Y más que ventajas éticas y fisiológicas, que hubieran podido enumerar hasta ensañarse, se refirieron a que pueden expresar lo que deseen, con la libertad que no existe en el llamado mundo real.
"Podemos expresarnos con transparencia, sin que nadie nos regañe". Fíjense bien cómo habló la Bella Durmiente muy despierta, títere de guante de Atrapasueños, grupo formado por cuatro titiriteras en 2004.
Y eso es nada a comparación de lo que dijo Bufón, de Mundotíteres -el de Los tres pelos de oro, y pensar que este grupo es nuevo, tiene apenas un año de haber surgido en el colegio San Roberto Belarmino, de Belén-: "los títiriteros hacen todo lo que nosotros necesitamos que hagan; mejor dicho, nosotros somos los dueños de los titiriteros". ¿Ah?
Y una muñeca de Soñando Entre Telones, una tal Carmen Piedras del Río, que actúa en el montaje de La pobre vieja rica -adaptación de La pobre viejecita, de Rafael Pombo-, se atrevió a afirmar que ellos, los títeres, sienten los mismos dolores, las mismas alegrías y tristezas que los titiriteros, y hasta ahí todo iba bien, pero remató diciendo que los muñecos "a veces nos burlamos de los jefes". ¡Vaya insolencia!Actuarían en otras obras
Todos ellos, los títeres de Mundotíteres, Soñando Entre Telones y Atrapasueños coincidieron en afirmar que no actuarían en montajes pornográficos, aunque respetan los roles que interpretan colegas de otros grupos.
Pero entre toda esta palabrería, los títeres terminaron confesando algunos deseos inconfesables.
Bufón dijo que a él no le disgustaría la idea de que lo incluyeran en los montajes de otras historias, no ser siempre lo mismo, un bufón. "Me gustaría ser como el Rey y no quedarme siempre como Bufón". Y lo peor de todo es que lo dijo delante del Rey y uno no sabe si a éste le habrá gustado.
Diablo, del mismo grupo, también señaló que le gustaría actuar en obras distintas a Los tres pelos de oro, a pesar de que la disfruta mucho.
"Me gustaría estar otras historias -dijo el Príncipe de las Tinieblas-, porque en todas ellas puede haber maldad, ja, ja, ja". Y se carcajeó malévolo.
Los títeres han oído hablar a los titiriteros sobre el Festival. Decir, por ejemplo, que es una oportunidad para dialogar con la ciudad. Insistir en que el teatro de títeres no es sólo para niños sino para públicos de todas las edades.
Saben que sus manipuladores son de los más jóvenes del Festival. Estudiantes de colegios de la ciudad, quienes se animaron a participar en los cursos que dan en el Manicomio de Muñecos.
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