¿Quién lo reclamará? La pregunta es sobre el cuerpo sin vida de Daniel Negrete Mantilla, quien perdió la vida en la madrugada del jueves pasado en un derrumbe en el barrio Once de Noviembre de Manizales.
En una entrevista en el 2009, al diario Q'hubo, el señor aseguró que su familia estaba regada por el mundo. Indicó que él nació en Cundinamarca y que la única persona que le importaba era su madre que vivía en Bogotá.
La Alcaldía de Manizales informó que en búsqueda del hombre participaron 40 personas, durante los dos días de labores, pertenecientes al Cuerpo Oficial de Bomberos, la Defensa Civil, Cruz Roja, el BYR, el GER, Bomberos Voluntarios, SAI, Utac y Policía.
La Unidad del Gestión del Riesgo en la capital caldense recordó que el señor, de aproximadamente 65 años, vivía con dos perros y un gato. "De éstos, dos fueron encontrados sin vida y el perro sobreviviente fue trasladado al Albergue Animal por parte de la Secretaría del Medio Ambiente".
El deslizamiento en el Once de Noviembre sucedió a las 4:10 de la mañana del jueves. La comunidad aseguró que el hombre estaba en la casa, pues cada noche llegaba a dormir luego de trabajar cuidando carros en el sector de El Cable.
Las actividades de rescate se complicaron, debido a que el sitio estaba convertido en una escombrera, lo que lo convirtió en una masa de tierra, piedras, material vegetal y basura.
Por eso, los organismos de socorro tuvieron que utilizar agua a presión. Así la labor manual era muy complicada, además no había acceso para maquinaria. La ventaja fue que el buen tiempo, sobre todo en la mañanas, permitió el trabajo de los socorristas.
Al mediodía del pasado domingo por fin observaron el cuerpo del hombre. El teniente de Bomberos Jorge Iván Quintero explicó que la remoción de los escombros se hizo con agua, pero a menos presión que en los días pasados.
La casa en donde vivía Daniel, según las autoridades, era una invasión. Negret llevaba viviendo allí dos años, luego de que un amigo se la cedió.
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