El Ministerio de Comercio ya empezó a jugarse las primeras cartas para afianzar las relaciones bilaterales de comercio con Venezuela.
Dos fueron las peticiones que el ministro Luis Guillermo Plata hizo a funcionarios del Gobierno de Caracas durante la reunión del viernes pasado. Una fue solicitar un aumento en la cuota de exportación de vehículos colombianos, y la segunda, agilizar el pago de deudas pendientes con los empresarios colombianos.
Y es que este ha sido el verdadero "coco" de los exportadores desde que las relaciones políticas se tensaron. No se suspendió el intercambio comercial, pero el que vende en el mercado del vecino país no tiene certeza de cuándo le van a pagar.
La medida aplica para aquellos bienes que Venezuela determina como no prioritarios, es decir, casi todos, excepto los alimentos.
Javier Díaz Molina, presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex), opinó que aunque las cifras han ido en aumento, el comercio entre los dos países ha marchado durante estos meses con mucho ruido e incertidumbre y enfatizó en que Colombia espera que se reduzca la carga burocrática que rodea cada negociación.
"Se demoran mucho los certificados, permisos, aprobaciones. Todos los trámites implican esperas de varios meses. Esto repercute en la agilidad de los pagos y en los resultados de las empresas", dijo el directivo de Analdex.
Para Díaz Molina, este acercamiento debería brindar un efecto en el mediano plazo. "Se requiere un acuerdo bilateral para que exista una armazón jurídica en las relaciones y no dependan solo del vaivén político".
Iván Amaya Villegas, presidente de la Asociación Colombiana de Productores Textiles (Ascoltex), se mostró de acuerdo con la postura de Díaz y opinó que al tema de los pagos debe dársele prioridad porque afecta a muchos empresarios.
"El caso es particularmente crítico para los empresarios de industrias como la textil, que se considera de bienes no prioritarios", indicó Amaya.
El presidente de Sofasa, Germán Camilo Calle, expresó su deseo que durante los próximos meses las comisiones económicas encargadas de revisar estos asuntos lleguen a conclusiones positivas. "De nuestra parte estamos atentos a atender cualquier requerimiento que pueda contribuir a este propósito".
A su vez, Tulio Zuloaga, presidente de Asopartes, destacó que de avanzar positivamente los acuerdos comerciales, se espera que aumente el número de vehículos exportados, lo que conllevaría a recuperar los 500 empleos que se han perdido en la industria automotriz. "La meta proyectada para el año era de 24 mil vehículos. Este acercamiento nos permitiría llegar a 40 mil".
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