Que haya tenido que estar alejado de su familia en Europa y que no tenga donde entrenar en Antioquia, no han sido impedimiento para que Sebastián González continúe en su intento de ser una gran figura en el automovilismo.
No le ha tocado nada fácil. Al Gran Premio de Cartagena, el pasado fin de semana, llegó sin entrenar y aún así fue segundo en la categoría ligth. En su país, sabe que a poco puede aspirar en un deporte que, como los karts, no cuenta con apoyo. Y para rematar, la única pista que tenían, la del kartódromo en la unidad deportiva Atanasio Girardot, se las quitaron y la administración municipal no responde por una sustituta.
Ahora, su reto es el Panamericano en Venezuela, del 1 al 5 de diciembre y su dolor de cabeza es dónde entrenar. "A nosotros los practicantes de los deportes de motor nos toca duro. Si queremos progresar tenemos que ir al exterior, pero el dinero no alcanza para estar toda una temporada", dice González.
Por fortuna, ya tiene un patrocinador, el Centro Comercial Los Delfines. "Esto nos permite planear algunos desplazamientos, no padecer tanto afuera por la falta de recursos y en el caso del Panamericano planear algunos desplazamientos, especialmente a Bogotá".
Al lado de Esteban Garzón, es de los pocos que sigue activo en Antioquia en esta disciplina y buscando un mayor apoyo, porque el próximo año dará el salto a la Fórmula 3.000 en Europa.
"Ya todo está arreglado para medírmele en el 2012 a un fórmula. Será mi nuevo reto en España, pasar de un karts a un fórmula y empezar a abrirme paso en los autos, porque mi objetivo es la Fórmula Uno", y lo dice con un convencimiento pleno de lo que es su futuro.
A los 17 años, lleva apenas tres en los karts, considera que es la hora de dar el salto y comenzar con los autos. "Todos saben que los karts es el mejor aprendizaje para uno llegar a los autos. Creo que es el momento de dejarlo, aunque no será fácil la nueva incursión".
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